"El plan fiscal de ajuste tiene que cerrar con empleo y con actividad económica", afirmó el gobernador cordobés tras alertar sobre el "ajuste salvaje" que, a su entender, está implementando el Gobierno Nacional
El gobernador de Córdoba, Martín Llaryora, alertó este lunes que con el «ajuste salvaje» del Gobierno nacional «sin un plan de empleo ni actividad económica«, Argentina puede padecer una «recesión nunca vista, casi peor a la del 2001», y pidió al presidente Javier Milei que convoque a los gobernadores para que sean escuchados.
El mandatario cordobés, en declaraciones formuladas al canal 12 local, destacó que está colaborando institucionalmente con el Presidente porque quiere que le vaya bien a la Argentina, sin embargo sugirió que para eso ocurra Milei tiene que «escuchar, consensuar y tener actitudes que hasta hoy no ha tenido. Se están tomando decisiones sin escuchar», reprochó.
En ese sentido instó al presidente Milei que «convoque a los gobernadores para que podamos trabajar en conjunto y hacer las reformas necesarias para una Argentina mejor», al advertir que «el plan fiscal de ajuste de esta manera tiene que cerrar con empleo y con actividad económica, sino entramos en una recesión nunca vista, casi peor a la del 2001».
Llaryora afirmó que el Gobierno nacional está aplicando un «ajuste salvaje para sostener los privilegios de la Capital (Federal)«, al mantener los subsidios a los servicios para ese distrito y «sacar al interior de Argentina».
«Basta de esta visión porteña de Argentina, esa visión unitaria que solo cuida a los vecinos que viven cerquita de la (Casa) Rosada y abandona al interior», cuestionó el gobernador de Córdoba, y añadió que el «ajuste es injusto, causa dolor social tremendo y no resuelve el problema del déficit».
También criticó la eliminación del incentivo docente, que consideró «una barbaridad» porque «Argentina va a salir con más educación, nunca con menos educación. Todos estamos reestructurando y achicando el gasto pero no se puede achicar la educación«, remarcó y afirmó que tanto el incentivo docente como el subsidio al transporte, entre otros, «no tienen impacto presupuestario» nacional.
Cuestionó también el «tremendo ajuste sobre los jubilados y sobre los programas sociales de la gente que lo necesita. Es brutal lo que están haciendo. La gente no llega a fin de mes».
Resaltó que va a colaborar con el presidente Milei para sacar al país adelante, «pero que no espere que no le diga lo que está pasando en el interior».