Sentite Mejor

Lipotimia: ¿por qué sucede y qué hacer en estos casos?


Prácticamente todos han sufrido, al menos una vez, un desmayo, pero ¿cuáles son las causas?

Prácticamente todos han sufrido, al menos una vez, un desmayo, pero ¿cuáles son las causas?

Por Leonardo Biolatto*

Las razones detrás de por qué se produce la lipotimia son explicables en su gran mayoría. Algunas causas son más frecuentes y cotidianas, mientras que otras refieren a problemas en órganos vitales como el corazón.

Partimos del hecho de que una lipotimia es un acontecimiento por el que muchos hemos atravesado en algún momento. O, al menos, conocemos gente cercana que se ha desmayado y nos hemos enterado, o lo hemos presenciado.

Lipotimia es una palabra que deriva del idioma griego. Se compone de dos partes: leipo que significa dejar, y timos que significa sentido. La expresión refiere a una pérdida del sentido, o sea, un desvanecimiento.

Para la medicina se habla del cuadro clínico cuando hay una pérdida breve del conocimiento que resulta por menor flujo de sangre al cerebro. Esa menor irrigación momentánea puede responder a causas variadas.

La pérdida de conocimiento de la lipotimia se acompaña de una pérdida del tono muscular, que es síntoma y mecanismo de defensa a la vez. La pérdida del tono lleva al desmayo y la caída, lo que provoca que el cerebro quede en el mismo nivel que el resto del cuerpo favoreciendo su irrigación.

Al caer, el cuerpo humano se asegura que el corazón necesite menos presión para hacerle llegar sangre al encéfalo. Por ello, la lipotimia se resuelve automáticamente en casi todos los casos y lo hace de inmediato.

Vamos a indagar las causas profundas, pero debemos saber que hay personas más propensas que otras a padecer estos desvanecimientos. Los ancianos, los que consumen medicamentos antihipertensivos y los pacientes cardiológicos poseen factores de riesgo.

Síntomas de la lipotimia

Cuando sucede el cuadro de lipotimia aparecen los signos que identificamos rápidamente como de desmayo. En general, hay signos previos al desmayo en sí y, luego, la caída. Entre los síntomas previos tenemos:

  • Falta de fuerzas: por la pérdida del tono muscular que es progresiva.
  • Palidez: sobre todo en el rostro, ya que al haber menos flujo de sangre hacia el encéfalo también se resiente la vascularización de la piel de la cara. Es el color que se recupera en poco tiempo tras la caída.
  • Sudoración: suele haber un sudor frío que anticipa la lipotimia. Esto es por una reacción en cadena del cuerpo intentando elevar la presión arterial como último recurso. La activación de nervios periféricos para evitar el desmayo trae aparejado el sudor.

Una vez que la producción de la lipotimia es imparable, acontece el desmayo y la caída. Allí, el síntoma principal es la pérdida de la conciencia, la desconexión momentánea con la realidad.

La caída puede aparejar como signo secundario una lesión traumática por el golpe que se sucinta. Estos golpes son peligrosos en individuos ancianos que incluso pueden fracturarse huesos grandes como el fémur, la cadera o radio y cúbito.

Causas de producción de lipotimia

A rasgos generales, la lipotimia tiene origen cardíaco en una pequeña proporción. Eso es bueno, ya que asumimos que la mayoría de los casos serán benignos, originados en otras causas menos preocupantes. Como causas generales de lipotimia tenemos:

  • Estrés: estados de ansiedad, de miedo y de angustia pueden llevar a un desmayo psicógeno.
  • Calor extremo: cuando el cuerpo ingresa a un proceso de deshidratación por calor disminuye su tensión arterial y eso afecta la irrigación cerebral.
  • Dolor: el cuerpo humano, al atravesar cuadros de dolor intenso, puede desmayarse como mecanismo de defensa para desconectar el cerebro del dolor. Además, el dolor persistente y potente es capaz de llevar a la hipotensión también.

Por otro lado, como causas más específicas de lipotimia mencionaremos:

  • Arritmias: el latido anormal del corazón es causal de desvanecimientos. Esto ingresaría en la categoría de síncope maligno.
  • Anemia: estados de anemia severa, con baja concentración de hemoglobina, alteran la circulación sanguínea y el aporte de oxígeno cerebral.
  • Hipoglucemia: en diabéticos con mal tratamiento o descompensados, o en personas que llevan muchas horas de ayuno, se puede dar una baja en la concentración de azúcar sanguínea. Esta hipoglucemia conduce al desmayo.

¿Qué hacer ante un desvanecimiento?

Habiendo aclarado que es una situación frecuente, debemos estar listos para actuar cuando presenciamos una lipotimia. No llegaremos al diagnóstico en ese momento, pero podremos dar una mano a quien lo necesita.

Lo primero ante un desmayado es comprobar que respira y que tiene pulso. Si es una lipotimia recuperará inmediatamente algo de conciencia y de contacto con el exterior.

Una vez conciente, habrá que colocarlo horizontal boca arriba y elevar sus miembros inferiores. Esto acelerará el flujo de sangre hacia el encéfalo, revirtiendo los síntomas de la lipotimia. También es útil suministrarle calor con abrigo si se siente que su piel esta fría. De esta forma, también se mejora la circulación.

Estaría contraindicado ofrecerle al instante comida o bebida. Es preferible esperar a que se recupere más, que pueda incorporarse y que acepte deliberadamente algo para alimentarse.

Si la lipotimia duró mucho tiempo, es un evento repetitivo, o la persona tiene antecedentes cardíacos, es indispensable la consulta médica. Puede haber sido un desmayo banal, pero se deben descartar patologías de riesgo.

 

*Graduado en Medicina por la Universidad Nacional de Córdoba (Argentina) en el año 2008. Máster en Promoción de la Salud y Desarrollo Social, en titulación conjunta, por la Universidad Pública de Navarra (España) y la Universidad de Bordeaux (Francia)

Fuente: Mejor Con Salud