El presidente de la Cámara de Diputados de Santa Fe reclamó a las autoridades nacionales que haya “un tratamiento serio y escuchen a quienes producen y hace años trabajan en el tema”.
El presidente de la Cámara de Diputadas y Diputados de Santa Fe, Miguel Lifschitz, realizó una fuerte crítica al gobierno de Alberto Fernández tras la falta de definiciones con respecto a la industria de los biocombustibles. Luego de haberse reunido semanas atrás con los principales referentes de las Cámaras del área, Lifschitz manifestó su apoyo al pedido de los Diputados Nacionales del Interbloque Federal, reclamó nuevamente “la urgente renovación de la ley de promoción del sector” y alertó: “Lo que proponen desde el gobierno nacional atenta directamente contra los productores de nuestra provincia”.
La ley 26.093, que vence el próximo 12 de mayo y tiene media sanción tras aprobarse en el Senado, no fue parte del temario de las sesiones extraordinarias tal como había sido prometido a fines del año pasado por el oficialismo nacional y sigue sin discutirse en Diputados, pese a un nuevo pedido de urgente tratamiento por parte del Interbloque Federal, del que es parte el socialista Enrique Estévez. Ante ello, Lifschitz se pronunció luego de conocerse versiones extraoficiales de un anteproyecto generado por el Ministerio de Desarrollo Productivo nacional.
“No sólo siguen dilatando la prórroga a menos de dos meses de caerse la actual legislación, lo que pone ya en grave peligro al sector, sino que la visión que está mostrando el ejecutivo nacional atenta directamente contra el mismo, sin escuchar el pedido de los legisladores ni de las propias empresas. Demuestra falta de conocimiento y, además, de humildad al no convocar a quienes desde hace años trabajan sobre el tema, que le han dado un impulso a lo largo de la última década y generando en Santa Fe una industria pujante que con estas decisiones corre grave peligro”, destacó.
El presidente de la Cámara baja recordó que la industria local produce el 80% del biodiesel del país, llevando a Santa Fe a ser la cuarta provincia en producción de energía. Además, resaltó que mayoritariamente son pequeños productores de distintos puntos de la provincia que generan cerca de 4 mil puestos de empleo y le dan rentabilidad a la cadena de la soja. “Nuestra provincia tiene una historia en la temática, con iniciativas que han llevado por ejemplo desde el 2018 a incorporar biodiesel en el transporte urbano de pasajeros, mientras que en el 2020 se sancionó con fuerza de ley el Programa Provincial de Uso Sustentable de Biocombustibles”, añadió.
“La mirada sesgada desde Capital Federal atenta directamente contra estos productores y contra el desarrollo energético de toda la provincia, lo mismo que ocurre en otras como Salta, Córdoba y Tucumán -continuó el exgobernador santafesino-. De llevarse adelante y continuar en este camino, sería un retroceso muy grande para muchas PyMEs que vienen haciendo un trabajo sostenido abasteciendo al mercado interno y también exportando”.
Asimismo, Lifschitz remarcó que “no sólo se habla de economías regionales, sino que es una actividad que ha generado, además de réditos económicos, grandes avances desde una perspectiva ambiental, generando energías limpias y un impacto positivo en todo el país”. “Este gobierno parece incapaz de tener una mirada de futuro, con un compromiso sostenible claro y generando oportunidades de desarrollo. Por el contrario, una vez más pone trabas en vez de apostar hacia las matrices productivas sustentables”, amplió.
Por último, el ex mandatario alentó “a que la política santafesina defienda con mayor ímpetu a los sectores que dinamizan la economía provincial”, y finalizó: “Durante muchos años hemos generado programas y políticas públicas para fomentar su desarrollo. No se puede permitir que, con un total desconocimiento de la realidad de cada provincia, se lleven por delante años de trabajo conjunto. Hay que defender a quienes han apostado, trabajan y generan empleo en Santa Fe”.