El gobernador de Santa Fe Miguel Lifschitz, quien se mantuvo en contacto permanente con sus ministros desde el sudeste Tailandia, ordenó al ministro de Seguridad, Maximiliano Pullaro, que tome «los recaudos necesarios para dar protección tanto a Manfrin como a los otros jueces y fiscales que han tenido intervención en algún momento» de las causas que involucran a Los Monos.
Al mismo tiempo, le pidió al titular de Justicia y Derechos Humanos de la provincia, Ricardo Silberstein, que se comunicara en forma directa con Manfrin para transmitirle su «total solidaridad y apoyo».
El gobernador también dijo que se tomó contacto desde la sede del gobierno santafesino con el Ministerio de Seguridad de la Nación con el objetivo de coordinar acciones «para encontrar a los responsables de la balacera y para profundizar las investigaciones en curso».
Según el gobernador, la violenta balacera «es un intento de amedrentar, de intimidar, de mostrar poder. Creo que son reacciones de bandas violentas que se sienten amenazadas ya que por primera vez en muchos años se está tratando de avanzar de manera articulada entre la provincia y la Nación y esto comienza a dar sus resultados»