Policiales

Liberaron al hombre que atacó la sede de la EPE en San Jorge pero le prohibieron acercarse a las oficinas


Fue imputado por daños y amenazas. El hecho ocurrió el lunes 21 de julio en pleno centro de la ciudad santafesina

Germán R., el hombre de 48 años que protagonizó un violento ataque en las oficinas de la Empresa Provincial de la Energía (EPE) en San Jorge, fue imputado este lunes por daños y amenazas y recuperó la libertad, aunque con una serie de restricciones, entre ellas la prohibición de acercarse a la sede de la empresa.

La audiencia se llevó a cabo en los tribunales de San Jorge, bajo la conducción del juez Pablo Ruiz Steiger. El fiscal Diego Rodríguez y Barros le atribuyó los delitos de daño y amenazas contra empleados y el gerente de la oficina atacada. La defensa estuvo a cargo del abogado Martín Durando.

El episodio ocurrió el pasado lunes 21 de julio, poco después de las 10, en la sede de la EPE ubicada en la esquina de Rivadavia y San Luis, en pleno centro de San Jorge. De acuerdo al relato fiscal, el hombre ingresó portando un pico similar al que utilizan los albañiles y provocó destrozos generalizados: rompió escritorios, computadoras, equipos de oficina y los ventanales del edificio, lo que obligó a una rápida evacuación del personal. Afortunadamente, no se registraron heridos.

Previo a la audiencia, el abogado defensor explicó que Germán había concurrido a realizar un reclamo por la quema de su computadora personal, supuestamente dañada por un pico de tensión eléctrica. El equipo era su única herramienta para buscar trabajo, ya que se encuentra desempleado. Según el letrado, al iniciar el trámite le entregaron un formulario, pero al completarlo le indicaron que no podía continuar el reclamo porque el servicio estaba a nombre de su abuela fallecida. «Cuando le dijeron que no iba a poder hacer nada, se fue, buscó un pico y regresó. Ahí fue cuando perdió el control y comenzó a romper todo», explicó Durando en diálogo con el programa Creo, de radio Aire de Santa Fe.

Aunque recuperó la libertad, Germán R. deberá cumplir con medidas alternativas a la prisión preventiva, entre ellas la prohibición de acercarse a cualquier oficina de la EPE.