El precandidato a presidente de Consenso Federal, Roberto Lavagna, habló cara a las elecciones nacionales. El político se refirió al vínculo con el FMI en caso de ser electo.
«El día uno de un nuevo gobierno es con nosotros mismos, no con el FMI. Para eso habrá tiempo, pero no tiene que ser la prioridad», destacó Lavagna en declaraciones a CNN radio.
En ese marco, el ex ministro de Economía de Eduardo Duhalde y Néstor Kirchner indicó que «primero hay que poner en marcha medidas que estimulen el consumo, ponerle dinero al bolsillo de la gente y trabajar con el Congreso para la reducción de impuestos, para que la inversión y la creación del empleo estén presentes desde el vamos». «Después de 20, 30 días, sí sentarse a discutir tranquilamente con el Fondo», completó.
En la búsqueda de mostrarse como una alternativa a Mauricio Macri y Alberto Fernández, Lavagna repartió críticas tanto al actual gobierno como al de Cristina Fernández de Kirchner.
«Llevamos ocho años de estancamiento, que son 32 trimestres. La dirección de la economía no es correcta con este gobierno ni con el anterior. Le corresponden cuatro años de estancamiento a cada uno, condiciones totalmente diferentes pero inclinadas hacia los extremos, en las que los resultados han sido malos», indicó.
Al criticar tanto al macrismo como el kirchnerismo, el postulante de Consenso Federal afirmó que «el gobierno anterior se había sentado sobre las tarifas, produciendo distorsiones muy importantes; y este gobierno se sienta sobre el valor del dólar por un motivo electoral, pero no evalúa en profundidad los riesgos de mantener precios artificiales en la economía».
Al ser consultado sobre el apoyo de la comunidad internacional a la gestión de Macri, Lavagna dijo que «el mundo tiene sus propios intereses y sobre todo el mundo financiero que está ganando muchísimo dinero en Argentina», pero advirtió que «confundir eso con el interés de los argentinos son dos cosas totalmente distintas» e ironizó: «desde la época de Cristóbal Colón hay gente que compra espejitos de colores».
Por último, manifestó que una economía sana «solo se logra cuando hay un casamiento entre consumo e inversión que mueven la ruedita». «El error del gobierno anterior fue solo caminar con el consumo y desatender la producción, y el gobierno actual pasó al otro extremo: consumo no y sí lluvia de inversiones, que no hubo. Tenemos que entender que esas dos cosas son centrales de manera permanente para lograr crecimiento», concluyó el precandidato.