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Las ventas y la producción industrial continuaron en baja en octubre


Con la llegada de noviembre empiezan a conocerse las estadísticas de lo ocurrido en materia económica durante octubre. Los números, nuevamente, no son positivos. Uno de los índices que se conoció fue el de las ventas minoristas que, según la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (Came), se derrumbaron un 9,4% anual en el décimo mes del año.

«Las ventas dependen del mercado interno, que está en franca caída en función de la pérdida de poder adquisitivo del salario, que hoy está agredido por los aumentos de tarifas, naftas e insumos. Todo impacta, y por ello la baja es tan pronunciada«, dijo a CLG Juan José Sisca, secretario de la Asamblea de Pequeños y Medianos Empresarios (Apyme) de Rosario.

A la inflación, como causante de la caída en las ventas, se le suma que «mucha gente perdió su trabajo» y que «gran cantidad de personas está en mora con el pago de tarjetas de crédito».

«En septiembre, la caída tanto en producción como en ventas fue del 9%»

«Los intereses son usureros y se vende poco y nada con el plástico. Muchos usaron la tarjeta para pagar tarifas u otras necesidades», agregó el también integrante de la Multisectorial contra los Tarifazos.

Desde el punto de vista industrial, los sectores más complicados son los «manufactureros» como textiles, calzado, muebles y metalmecánica. «En septiembre, la caída tanto en producción como ventas fue del 9%«, remarcó.

Mes a mes, los números negativos se siguen sumando en todos los ámbitos. Sisca sostuvo que otro de los problemas es la falta de créditos: «Hoy lo más accesible, que es el descubierto en un banco a siete días, está en un 79% anual. Es imposible acceder a uno».

«Lamentablemente, si sigue este modelo económico que el gobierno está dispuesto a mantener por lo que se observa en el Presupuesto, el panorama para las Pymes es tétrico», anunció.

En cuanto a las exportaciones y los mensajes del Ejecutivo para que las pymes puedan realizarlo, aclaró: «Son pocas las empresas que pueden hacerlo. La economía está dolarizada y el mundo está en modo vendedor y no compra. Además, la fluctuación del dólar no favorece».