Entre la gran variedad disponible, hay unas que se destacan por su elevado contenido en omega-3
Sumar semillas a la dieta es una forma sencilla y nutritiva de mejorar la salud general, ya que son ricas en vitaminas, minerales y ácidos grasos beneficiosos.
Entre la gran variedad disponible, hay unas que se destacan por su elevado contenido en omega-3, lo que las convierte en un aliado eficaz para regular los niveles de colesterol en sangre y la presión arterial.
Propiedades y beneficios de las semillas de chía en la salud integral
Las semillas de chía son una rica fuente de ácidos grasos omega-6 y omega-3, además de incluir vitaminas A, B, C y E, calcio, boro, fósforo, magnesio, zinc y potasio, lo que las convierte en un alimento altamente nutritivo.
Las semillas que ayudan a reducir el colesterol, regulan el azúcar en sangre y protegen los huesos
Según CuerpoMente, estas semillas también resaltan por su alto contenido de fibra, tanto soluble como insoluble, lo que produce sensación de saciedad y ayuda a regular el tránsito intestinal.
A diferencia de otras semillas, la chía aporta una gran cantidad de antioxidantes, los cuales contribuyen a la eliminación de toxinas del cuerpo y retrasan el daño celular. Gracias a estas propiedades, su consumo puede ayudar a prevenir enfermedades como el cáncer, las cardiopatías y el Alzheimer.
Su consumo genera los siguientes beneficios:
- Protegen la salud del corazón y reducen el colesterol: estas semillas reducen significativamente las concentraciones de colesterol total y LDL, controlan los niveles de azúcar en sangre y previenen el surgimiento de enfermedades cardíacas.
- Disminuyen la inflamación: en contacto con el agua, las semillas de chía multiplican su tamaño en el tracto digestivo y presionan las paredes intestinales. De esta forma, estimulan el movimiento de los intestinos y calman la inflamación.
- Regulan el azúcar en sangre: las semillas de chía son una gran fuente de fibra, la cual ayuda a evitar picos de glucosa e insulina en la sangre.
- Ayudan a controlar el peso: producen sensación de saciedad gracias a su capacidad de absorber líquidos. Además, al regular los niveles de azúcar en sangre, ayuda a evitar los antojos dulces.
- Protegen los huesos: 30 gramos de chía aportan el 20% de la cantidad de calcio recomendada, un mineral esencial para la salud ósea.
¿Cómo sumar las semillas de chía a la dieta?
Las semillas de chía son un snack versátil que se puede incluir fácilmente en diversas recetas. Algunas opciones para integrarlas a la dieta son:
- Ensaladas.
- Yogures.
- Granolas.
- Panes.
- Postres.
Las semillas que ayudan a reducir el colesterol, regulan el azúcar en sangre y protegen los huesos
En algunos casos, antes de sumarlas a las comidas, es necesario prepararlas según cómo se quieran consumir. Las diferentes maneras de hacerlo son:
- Semillas de chía crudas: esta es una de las formas más sencillas y eficaces de bajar los niveles de colesterol malo.
- Semillas de chía molidas: otra opción es moler las semillas y agregarlas al café o cualquier otra bebida para facilitar su absorción.
- Gel de chía: para hacerlo, se deben remojar las semillas en agua caliente y dejarlas reposar unos 20 minutos hasta que adquieran una textura gelatinosa. El gel se puede comer solo o mezclado con yogur.
- Agua de chía: es la forma más sencilla de sumarlas a la dieta. Solo se debe agregar las semillas en un vaso de agua y mezclar bien antes de beber.
- Aceite de chía: destaca por su alta concentración de omega-3. Para extraerlo, se deben moler las semillas, mezclaras con agua caliente, hervir la mezcla y retirar el aceite que se separa en la superficie.