Alberto Fernández mantuvo una reunión con Axel Kicillof en la Casa Rosada donde evidenciaron la saturación del sistema sanitario
El presidente Alberto Fernández advirtió hoy sobre «las personas que se enferman en la Ciudad y deambulan buscando una cama» y remarcó que «terminan atendidos en el Gran Buenos Aires», ante lo cual pidió «no fingir o mentir con las estadísticas».
El mandatario contó que durante la reunión que mantuvo el pasado viernes con el gobernador bonaerense, Axel Kicillof, analizaron la situación del sistema sanitario de la Ciudad y su impacto en el Conurbano.
«Lo que básicamente planteamos fue la preocupación que venimos trayendo de la saturación de camas en la Ciudad. Lo venimos planteando y por momentos daría la impresión de que la Ciudad no toma en cuenta el dato», sostuvo el jefe de Estado.
En diálogo con Radio 10, Alberto Fernández indicó que «se está dando un fenómeno, más allá de los datos estadísticos que se muestra: las personas que se enferman en la Ciudad deambulan buscando una cama y terminan en el Gran Buenos Aires atendidos».
«Hablamos de buscar la manera de ampliar el número de camas de Terapia Intensiva en el Gran Buenos Aires, porque allí terminan muchos porteños que no encuentran un lugar en los sanatorios privados ni en los hospitales públicos», remarcó.
Y añadió: «Empezamos teniendo problemas con el PAMI. Ahí entendimos que era una decisión política del Gobierno de la Ciudad no atender a la gente del PAMI en la Ciudad y derivarlos a la Provincia. Pero después empezamos a ver que ese problema se repetía con todos los efectores privados».
En ese sentido, insistió en que apuntarán a «ampliar el número de camas para que a nadie le falte, para que si no lo tienen en la Ciudad, tengan la garantía de tenerla en la Provincia».
Ante esta situación, Alberto Fernández cuestionó al jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta.
«No podemos hacernos los distraídos y mucho menos fingir o mentir con las estadísticas: la única estadística que cuenta es la de la persona que está 20 horas dando vueltas en una ambulancia buscando una cama donde terminar siendo atendida. Eso es lo único que cuenta», lanzó.
La ocupación de las camas de terapia intensiva en los hospitales públicos porteños es casi del 80 por ciento: en una semana el porcentaje pasó del 61,1% al 79,7%, según los reportes diarios del Ministerio de Salud de la Ciudad de Buenos Aires.
Al momento, hay un total de 359 camas críticas ocupadas sobre 450 disponibles en el sistema de salud público, y 720 personas permanecen internadas en estado moderado.
También criticó a la alianza opositora Juntos por el Cambio por sus cuestionamientos iniciales a la vacuna Sputnik V. «Los que me denunciaron por envenenar gente ahora dicen que nunca dijeron que envenenaba gente. En el medio, dijeron eso para asustar a la gente y que no se vacune. Celebran las vacunas que no llegan. El odio nos está llevando al peor de los mundos», se quejó.
A la vez, el Presidente instó a la población a «quedarse en casa, circular lo menos posible» en cumplimiento de las medidas restrictivas adoptadas en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) para frenar el impacto de la segunda ola de casos de coronavirus.
«Sé de lo antipático de las medidas que tomo, pero es para cuidar a la gente», añadió.
Alberto Fernández también se refirió a la provisión de vacunas contra el coronavirus. «No saben el tiempo que dedico para hablar personalmente con laboratorios y presidentes del mundo para conseguir vacunas. Muchos me dicen que nos va bien porque estamos entre los países que más han vacunado, pero no nos va bien: el tema es que a otros les va muy mal», afirmó.
«Tuve una comunicación con el CEO de AstraZeneca (Pascal Soriot), a quien le manifesté mi malestar con lo que está pasando: la Argentina ha producido cerca de 30 millones de principios activos y no ha vuelto la cantidad de vacunas que habían prometido traer. Estamos hablando con Moderna, con Pfizer, con Jannsen, con absolutamente todos para resolver el problema de las vacunas, que faltan en todo el mundo», concluyó.