Los constantes días de lluvia que ya parecen ser parte de Rosario trajeron complicaciones para todos, menos para las lavanderías: los negocios de lavado de ropa han recibido mucho trabajo debido a la imposibilidad de la gente de lavar y secar sus prendas en sus casas.
Con La Gente se contactó con el dueño de una lavandería ubicada en pleno centro de la ciudad, quien aseguró que “son días de mucho trabajo”. “La lluvia acercó a la gente en grandes cantidades y sinceramente hay días en los que no damos abasto”, señaló Hugo, encargado de un negocio que lleva más de 10 años en la zona.
Sin dudas, la lluvia y la humedad le trajeron más de un problema a los ciudadanos a la hora de lavar la ropa, y es por eso que deciden llevar las prendas a lavanderías, donde se ofrece lavado y secado en poco tiempo.
“Se nos amontona el trabajo y a veces tenemos que dejar tandas de ropa para el otro día. Esto viene desde hace una o dos semanas y de manera constante. La verdad que tenemos muchos clientes, muchos más de lo normal”, enfatizó el comerciante.