Los despachos de cemento registró una suba de 6,4% en agosto frente a julio , y continuó achicando a caída interanual
Los despachos de cemento volvieron a registrar un repunte mensual en agosto, esta vez de 6,4% frente a julio, y continuaron reduciendo la caída interanual, que fue de 12,3% (frente a 13,2% el mes pasado), informó la cámara que agrupa a las empresas del sector.
Según la Asociación de Fabricantes de Cemento Portland (AFCP), el retroceso frente a 12 meses atrás se viene acotando mes a mes, luego de la baja interanual de 32,9% en mayo, cuando se entregaron apenas 653.135 toneladas, nivel mensual comparable con el de mediados de 2005.
Con algo más de un millón de toneladas despachadas durante agosto, las entregas acumuladas en los primeros ocho meses del año sumaron 7,5 millones, 25,8% menos que en igual período de 2019 (hasta julio el descenso era de 27,9% y en el primer semestre fue de 30,6%).
Los fabricantes de cemento (las empresas Loma Negra, Holcim, Cementos Avellaneda y PCR) confían en una lenta recuperación de la actividad en los próximos meses y esperan limitar la caída de todo 2020 a 18,3%; se totalizarían así despachos por más de 9 millones de toneladas.
Esas expectativas reflejan una mejora frente a las estimaciones realizadas el mes pasado, cuando se calculaba una baja anual de 20,7% y 8,8 millones de toneladas despachadas durante este año.
En junio se proyectaba una performance anual de 8,6 millones de toneladas, es decir, un descenso de 22,1% frente a 2019, y el pronóstico de mayo era de un retroceso de 31,2%, hasta un volumen anual apenas superior a los 7,1 millones de toneladas, menor al registrado 15 años atrás.
Por el impacto de la pandemia, la AFCP pronosticaba un derrumbe del sector, a raíz de la paralización de actividades por la cuarentena, que afectó la demanda privada y pública de los sectores vivienda, vial, de obras públicas e infraestructura.
La capacidad instalada de la industria es actualmente de 15,3 millones de toneladas anuales, es decir, 1,27 millón por mes, lo que fue aprovechado en agosto en un 82,8%. En julio el potencial utilizado por la industria fue de 68,5%, en junio llegó al 63% y en mayo, alcanzó a apenas 52%.
El desplome productivo y de ventas de cemento comenzó después de la devaluación del peso, en agosto del año pasado, luego de las elecciones primarias.
Desde entonces se agravó el cuadro recesivo iniciado en 2018, cuando los envíos decrecieron 1% frente a los de 2017, de acuerdo con las estadísticas de la AFCP.
En todo 2019 el descenso de los despachos fue de 6,1%, hasta 11,1 millones de toneladas, cifra que la Asociación de Fabricantes esperaba repetir este año, según las expectativas que mantenía durante el verano, antes de la pandemia.