Los mercados aguardan la publicación del viernes del informe de empleo de junio por el Departamento del Trabajo: se espera un buen indicador que podría motivar a la Reserva Federal (FED) a reducir su estímulo
Las bolsas internacionales registraban hoy valores positivos en su mayoría, mientras que el petróleo operaba con subas en los mercados de referencia.
Los índices bursátiles de la región Asia-Pacífico cerraron con resultados negativos, según la agencia Bloomberg, debido al temor en la región por un endurecimiento de las restricciones frente al rebrote de coronavirus.
Registraron pérdidas el índice japonés Nikkei con 0,29%; Corea (Kospi) 0,44% y Taiwán (Taiex) 0,23%.
Del mismo modo, los índices chinos de Shenzhen y Shanghai retrocedieron 0,97% y 0,07% respectivamente, mientras que Hong Kong (Hang Seng) no operó por ser día festivo.
Los datos publicados en Asia hoy plantean un panorama mixto: si bien la encuesta de confianza en las grandes manufactureras por el Banco de Japón consignó su registro más alto en dos años y medio, una encuesta privada de Caixin/Markit indica una ralentización en el crecimiento de la actividad en las industrias chinas por problemas en los suministros y rebrotes de Covid-19.
Paralelamente, las principales bolsas europeas operaban con alzas: ascendían Londres (FTSE100) con 1,13%, Madrid (IBEX35) 1,23%, Milán (FMIB) 0,74%, Francfort (DAX) 0,50% y París (CAC40) 0,83%.
Todos los sectores se muestran en verde, con el turístico liderando.
Según el índice de gerentes de compras (PMI) de IHS Markit, la actividad manufacturera europea marcó un nuevo récord de crecimiento en junio.
El mercado de la región confía en la recuperación económica dejando de lado las preocupaciones por la inflación y la expansión de la variante Delta de Covid-19.
Asimismo, se espera que el Banco Central Europeo mantenga su política de compra de bonos por más tiempo que la Reserva Federal (FED).
En tanto, en Nueva York las bolsas operan con mayoría de alzas: el principal índice, el Dow Jones Industriales, subía 0,18% hasta 34.564,09 puntos; mientras que el índice selectivo S&P 500 ganaba 0,33%. En cambio, el tecnológico Nasdaq caía 0,35%, y lideraban los papeles energéticos, financieros e industriales.
Los mercados aguardan la publicación del viernes del informe de empleo de junio por el Departamento del Trabajo: se espera un buen indicador que podría motivar a la Reserva Federal (FED) a reducir su estímulo.
La publicación hoy de los pedidos semanales de subsidios por desempleo, que bajaron más de lo esperado (a 364.000 frente a los 390.000 previstos) refuerzan este pronostico.
En tanto, la Bolsa de San Pablo operaba con un retroceso de 1,11% y se ubicaba su principal índice, el Bovespa, en 125.397,80 puntos.
Por su parte, la Bolsa de Comercio porteña ganaba 0,80% y el índice Merval se ubicaba en 62.759,57 puntos, cortando una racha de cuatro ruedas negativas; y el riesgo país se incrementaba una unidad (0,1%) ubicándose en 1.597 puntos básicos, según el índice que elabora el JP Morgan.
Las acciones de las empresas argentinas que cotizan en Wall Street operaban con signos mayormente negativos, con caídas de hasta 5% en Telecom Argentina (TEO) y ganancias de hasta 3,7% en Cresud (CRESY).
Por su parte, el precio del petróleo presentaba alzas, superando por momentos los US$ 75 (por primera vez desde 2018) y luego de comenzar el año por debajo a US$ 48,5 el barril, a causa de la creciente demanda tras las reaperturas económicas.
El mercado sigue expectante a la reunión del hoy de la OPEP+ donde los países productores de crudo decidirán los niveles de suministro para la segunda mitad del año.
Se espera un incremento cauteloso de la producción a 500.000 barriles diarios con el objetivo mantener los precios en niveles altos, aunque estables.
El crudo West Texas Intermediate (WTI), que cotiza en el mercado a futuro de Nueva York (Nymex), avanzaba 1,81% y se comercializaba a US$ 74,80 el barril en los contratos con entrega en agosto; en tanto el Brent, que opera en el mercado electrónico de Londres (ICE), se transaba a US$ 75,55 y se valorizaba 1,25% en los contratos con entrega en septiembre.
Por último, el bono a 30 años de EE.UU. mostraba un rendimiento de 2,09%, mientras el título a 10 años rendía 1,48% anual y el mismo activo a dos años contabilizaba una renta de 0,25%.