Se advirtió que los costos de reestructuración significativos a medida que las aerolíneas de la región se ajustan a las nuevas realidades comerciales afectarán el desempeño financiero,
Las aerolíneas latinoamericanas recortarán este año sus pérdidas operativas, de los US$ 5.600 millones previstos en 2021 a US$ 3.700 millones que se esperan para 2022, según el análisis que se realizó en la apertura de la 77° edición de la Asamblea General Anual y Cumbre Mundial del Transporte Aéreo, en Londres.
En la primera jornada de deliberaciones, encabezada por Willie Walsh, director general de IATA, se expuso que la mayoría de los mercados de la región están abiertos, pero con algunas excepciones notables, y que la fortaleza del mercado estadounidense-latinoamericano será un factor importante que contribuirá a la mejora.
No obstante, se advirtió que los costos de reestructuración significativos a medida que las aerolíneas de la región se ajustan a las nuevas realidades comerciales afectarán el desempeño financiero, lo que mantendrá a la región en una pérdida colectiva.
A nivel global, la perspectiva de las aerolíneas muestra mejores resultados en medio de la continua crisis de Covid-19, y en ese sentido se espera que las pérdidas netas de la industria se reduzcan a US$ 11.600 millones en 2022, después de sufrir un quebranto de US$ 51.800 millones en 2021.
Las estimaciones de pérdidas netas registradas por las aerolíneas durante 2020 se revisaron hasta US$ 137,700 millones, en lugar de los US$ 126.400 millones que se habían anunciado, por lo que se espera que el rojo total de la industria en 2020-2022 alcance los US$ 201.000 millones.
En tanto, se estima que la demanda (medida en pasajeros por kilómetro transportado) se ubique en el 2021 en un 40% de los niveles de 2019 y aumente al 61% en 2022.
Así, el número total de pasajeros sería de 2.300 millones en 2021 y se extenderá a 3.400 millones en 2022, nivel similar al de 2014 y significativamente por debajo de los 4.500 millones de viajeros de 2019.
Se espera a la vez que la fuerte demanda de carga aérea continúe, con la demanda de 2021 en un 7,9% por encima de los niveles de 2019, creciendo a un 13,2% por encima de los niveles de 2019 para 2022.
«Para sobrevivir, las aerolíneas han reducido drásticamente los costos y adaptado su negocio a las oportunidades disponibles», dijo Walsh en su discurso de apertura de la Asamblea.
«Eso hará que la pérdida de US$ 137.700 millones de 2020 se reduzca a US$ 52.000 millones este año. Y eso se reducirá aún más, a US$ 12.000 millones en 2022», agregó.
Walsh destacó que «hemos superado con creces el punto más profundo de la crisis. Si bien persisten problemas serios, el camino hacia la recuperación está a la vista. La aviación está demostrando su resistencia una vez más».
Remarcó que «el negocio de la carga aérea está funcionando bien y los viajes nacionales se acercarán a los niveles previos a la crisis en 2022. El desafío son los mercados internacionales, que siguen gravemente deprimidos a medida que continúan las restricciones impuestas por el gobierno».
«Estamos totalmente de acuerdo en que las personas vacunadas no deberían tener limitada su libertad de movimiento de ninguna manera. De hecho, la libertad de viajar es un buen incentivo para que más personas se vacunen. Los gobiernos deben trabajar juntos y hacer todo lo que esté a su alcance para garantizar que las vacunas estén disponibles para cualquiera que las desee», concluyó Walsh.