La oleaginosa llegó a su máximo valor desde 2014 en el mercado de Chicago, la plaza de referencia mundial
El precio internacional de la soja continúa con su rally alcista, que no se detiene desde agosto del año pasado. Esa jornada no fue la excepción: la cotización en el mercado de Chicago saltó por encima de los USD 19 y se ubicó en torno a los USD 524 la tonelada en su contrato con vencimiento en el mes de marzo del presente año.
De esta manera, el contrato de referencia de la oleaginosa escalaba esta tarde USD 19,38 hasta los USD 523,7 la tonelada en la plaza bursátil norteamericana. Así, si se toman en cuenta lo que va del año, el grano, que junto a sus derivados se erige como el complejo exportador más importante y que más divisas genera para el país, subió más de USD 41,3 la tonelada, ubicándose en precios máximos desde 2014.
Las razones de la suba del precio se centran en los resultados del informe de oferta y demanda mundial de grano del Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA). Allí, los operadores descontaban un nuevo recorte en las existencias o stocks del país norteamericano debido a la fuerte demanda de China.
Según la corredora de granos Grassi, los stocks finales de soja en Estados Unidos fueron estimados en el presente informe en 3,81 millones de toneladas, de acuerdo a lo esperado por el mercado, y casi un millón de toneladas por detrás de lo calculado el mes pasado. A esto se sumó un nuevo recorte en la estimación de producción, la cual pasó de 113,5 en diciembre a 112,5 millones de toneladas, mientras que los operadores solo esperaban un recorte de 200.000 toneladas.
Otro factor que dio soporte fue la creciente demanda interna de la oleaginosa para procesamiento en Estados Unidos, como así también las exportaciones. Según el informe, el consumo doméstico para crushing subiría en 200.000 toneladas hasta los 59,9 millones de toneladas, mientras que los despachos al exterior aumentarían en 800.000 toneladas para ubicarse en 60,7 millones de toneladas.
Respecto a Argentina, la dependencia norteamericana redujo la previsión de producción en 2 millones de toneladas hasta las 50 millones de toneladas, mientras que dejó sin cambios la estimación de exportaciones en 7 millones de toneladas. A nivel mundial, los datos no fueron necesariamente alcistas. La producción cayó 1,1 millones de toneladas hasta 361 millones de toneladas, pero el dato más relevante estuvo en el ajuste de los stocks, los cuales se ubican bastante por encima de lo que esperaba el mercado. En base al informe, las existencias mundiales hoy se calculan en 84,3 millones de toneladas, mientras que los operadores esperaban que se ubiquen en 82,7 millones de toneladas.