El Sindicato Municipal reclama por aumento salarial y denuncia precarización laboral en las distintas dependencias
La relación entre los trabajadores municipales rosarinos y el Ejecutivo local se encuentra en estado de ebullición. En ese sentido, desde el sector gremial no se descarta movilizar a la Intendencia. Por ahora, se vienen realizando masivas asambleas en distintas dependencias municipales. Los reclamos son por deficientes condiciones de trabajo, la pérdida del poder adquisitivo, la ausencia de la mesa de relaciones laborales y la falta de diálogo que “manifiesta el Ejecutivo”, según dijo Antonio Ratner, secretario General del gremio local.
En dicho marco, el histórico dirigente gremial fue el vocero central en las asambleas recientemente realizadas en el patio de la repartición Conservación de la vía pública y el Cemar: “Los reclamos son la falta de diálogo, de herramientas, de insumos, todo lo que viene sucediendo en la Municipalidad de Rosario desde el inicio de la era Milei, donde todos los dirigentes políticos quieren emular al gobierno nacional en la forma de ajustar“, destacó.
En otro tramo de su alocución en la última asamblea en el Cemar, Ratner dijo que “se trabajó para tener 7 hospitales, 52 centros de salud, ya que la presencia del Estado en los barrios es a través de los empleados municipales. Y hoy, esa presencia se ve afectada por falta de presupuesto, falta de personal, falta de insumos, medicamentos que no llegan, vecinos que terminan interpelando al empleado municipal porque no tiene respuesta para dar”.
Respecto a posibles aumentos salariales, Ratner fue muy concluyente: “Creemos que están esperando directivas del gobierno provincial. En Rosario ya no se discute más salario. El sueldo que se discute es el que decide apoyar, o se da por decreto. Y el que no lo acepta, se lo mandan a pagar. Y si alguno se queja, le descuentan el día”, arrojó en claro tono de queja.
Por lo pronto, el titular de los municipales indicó que “hay 80 mil nuevos vecinos que se atienden en la salud pública producto de la desocupación, del achique y todo eso hay que sostenerlo con la estructura municipal que tenemos y cuando uno va y lo plantea se encuentra que no hay una definición de hacía dónde vamos”.
También Ratner planteó que la situación de carencia que se viene atravesando en muchas dependencias municipales «no es un tema de presupuesto, el trabajador municipal participa en un 44 por ciento del presupuesto, es la mejor ciudad de Sudamérica en relación de sus trabajadores con su estado por la cantidad de habitantes que tiene Rosario”.
Ante estos planteos dirigidos a la Intendencia, Ratner subrayó que la predisposición del sector gremial “es la del diálogo, la del consenso y de ver cómo salimos de los problemas. Ahora, el Ejecutivo municipal lo que hace es seguir al gobernador y el gobernadora pacta con el presidente lo que significa ajuste”.
Respecto a la discusión paritaria, el gremialista dijo: “Rosario tenía su propia paritaria, su propia discusión y el 10 de diciembre esto cambió. Ahora, tenemos que esperar que el gobierno de la provincia diga cuales son los márgenes y cómo orientar a los municipios que son 365 en Santa Fe pero Rosario es diferente ya que no tiene el presupuesto muy afectado por la cantidad de trabajadores y entonces desde provincia se dice cuánto se puede dar y la Municipalidad local se ajusta a eso”.
“Por eso son las asambleas, las respuestas de la gente que quiere convocarse, quiere marchar y la tarea nuestra es que esa expresión la podamos tener en el corto plazo frente al palacio municipal”.
Por lo pronto, Ratner dijo que se seguirá en el mes de septiembre con asambleas y habrá una gran convocatoria de la Intersindical “porque lo que están pasando los municipales, lo pasan todos los trabajadores. Habrá una gran convocatoria de los sectores del trabajo para que no se profundice este ajuste y para volver a tener canales normales de comunicación”, completó.