El «Día del Futbolista Argentino» se celebrará oficialmente por primera vez este martes a 66 años del hecho que provocó la elección de esta fecha como la indicada para este homenaje, el ya legendario «gol de Ernesto Grillo a los ingleses», y aunque desde la gremial de los jugadores ésta era una jornada de referencia, recién desde ahora, y por ley del Congreso Nacional, se la reconocerá con formalidad.
El hecho de que esta celebración se realice «oficialmente» por primera vez -lo que marca un demorado reconocimiento y a la vez un hito en la historia de la actividad- obedece a que el gobierno nacional reglamentó el jueves 15 de noviembre del año pasado las leyes sancionadas por el Congreso por las cuales se declaró al fútbol como «deporte popular» en el país y se estableció al 14 de mayo como el «Día del Futbolista».
La ley que declara al fútbol como «deporte popular» es la 27.461, aprobada el 10 de octubre de 2018 y publicada el 15 de noviembre en el Boletín Oficial.
«Institúyese al fútbol como deporte popular», determina el artículo primero de esa ley enviada por los legisladores Emilio Monzó, Federico Pinedo, Eugenio Inchausti y Juan Pablo Tunessi al Ejecutivo, que también reglamentó la 27.460, que oficializa el 14 de mayo como el «Día del Futbolista», algo que ya era celebrado en el país de manera inorgánica, impulsada por la conducción de Futbolistas Argentinos Agremiados (FAA).
Esta fecha, entonces, rendirá homenaje anualmente «en su día» a los futbolistas nacionales y, a partir de este «primer acto» oficial es que la Legislatura porteña homenajeará hoy a las 18 a Ricardo Enrique Bochini, el máximo ídolo viviente de Independiente, justamente el mismo club de Avellaneda en el que surgió al estrellato Ernesto Grillo a principios de la década del 50.
Bochini fue campeón del mundo con el seleccionado nacional en México 1986 y Grillo, que el 1 de octubre próximo hubiese cumplido 90 años y falleció el 18 de junio de 1998, dio origen al «Día del Futbolista Argentino» vistiendo la camiseta albiceleste por una proeza consumada 33 años antes de aquel título ecuménico del equipo que tenía en sus filas a un gran admirador del «Bocha», nada menos que Diego Armando Maradona.
El registro en cuestión tuvo lugar en oportunidad en que Argentina enfrentó a Inglaterra en un partido amistoso jugado el 14 de mayo de 1953 en un estadio Monumental colmado por 85 mil hinchas. Por aquel entonces, el conjunto nacional tenía como entrenador a Guillermo Stábile.
Los visitantes se pusieron en ventaja con un tanto de George Taylor, pero pronto llegaría una conquista que marcaría un antes y después en el fútbol argentino: Grillo avanzó por la izquierda y dejó a tres rivales en el camino, se metió en el área y llegó hasta la línea de fondo. Ante la salida del arquero inglés John Ditchburn definió casi sin ángulo al primer palo y marcó el tanto que, a partir de ese día, sería recordado como «el gol imposible».
Ya en la segunda parte, Rodolfo Micheli, su compañero en la delantera de Independiente, y otra vez el propio Grillo, con su segunda conquista de la tarde, redondearon el triunfo por 3-1 para el seleccionado argentino.
La revancha de aquel amistoso se jugó tres días más tarde, también en el Monumental, pero no pudo completarse por las intensas lluvias y fue suspendido a los 22 minutos del primer tiempo con el marcador en blanco.
Esta fecha contemplará, aunque no esté en los registros oficiales, la memoria de otros grandes mojones de la historia futbolera, como el primer campeonato mundial de Argentina 1978 con el equipo dirigido por César Luis Menotti que tuvo como figura saliente a Mario Alberto Kempes, o más acá en el tiempo a Lionel Messi, el único compatriota en ganar cinco «Balones de Oro».
Pero también quedarán en la memoria otros grandes que ya no están, en una lista interminable por la riqueza de la historia del fútbol argentino, que hace cuatro años, y justamente un 14 de mayo, vivió una jornada luctuosa con la muerte del futbolista de San Martín, de Burzaco, Emanuel Ortega, que en la cancha de su equipo que juega en la Primera C, chocó su cabeza con un muro colocado a centímetros de la línea lateral en la cancha de su club y perdió la vida.
Por ese hecho se suspendió toda actividad futbolística, salvo el superclásico entre Boca Juniors y River Plate que debía cerrar esa noche la llave eliminatoria de octavos de final de la Copa Libertadores en la Bombonera, donde se vivió otra circunstancia lamentable: el encuentro fue suspendido por la agresión a jugadores de River en el entretiempo por parte de un hincha «xeneize» que les arrojó gas pimienta. Los «millonarios» ganaron los puntos en la Conmebol y fueron después campeones de América.
Eso también pasó un 14 de mayo, como para refrendar el concepto del otro artículo de la ley, el que menciona al fútbol como «deporte popular», con todo lo bueno y lo malo que eso conlleva.