Informes de dos cámaras de las industria frigorífica mostraron hoy, en base a datos oficiales, que tanto la producción de carne como el consumo de ese alimentos mostraron firmeza en marzo pasado.
De todos modos, en el sector se encendieron luces de alerta por los efectos de la sequía en el futuro, pues el fenómenos ya provocó un fuerte descenso de los valores de la hacienda.
La Cámara de la Industria y el Comercio de Carne (Ciccra), por un lado, y el Consorcio de Frigoríficos Exportadores (Consorcio ABC), por el otro, informaron que el mes pasado la faena de bovinos se mantuvo elevado, por arriba del millón de animales.
«La faena total de hacienda vacuna se ubicó en 1,076 millones de cabezas y resultó 3,9% menor a la de marzo del año pasado», reveló Ciccra, que de todos modos aclaró que «si se corrige la faena por la cantidad de días hábiles, en términos interanuales resultó casi 6% superior» a la de marzo de 2017.
La mismo solidez de los números industriales fue destacada por Mario Ravettino, titular del Consrocio ABC: «Al considerar el promedio diario de animales sacrificados se observa que superó a enero de 2018 y que también fue el nivel más alto desde 2009 para el mes de marzo”, detalló.
«Si bien el período comentado es atípico por la incidencia de la Semana Santa, todo indicaría que la faena de vacunos se mantiene firme aunque amesetada en un nivel que oscila en las 1,1 millones de cabezas», subrayó el empresario.
El mercado interno también mostró señales de vigor en marzo. Miguel Schiariti, de Ciccra, precisó que «el consumo per cápita de carne vacuna se ubicó en 58,3 kilogramos anuales al considerar el promedio móvil de los últimos 12 meses».
De todos modos, la persistencia de la sequía que también afecta al sector ganadero, en especial porque limita severamente la oferta de pasturas para alimentar a las vacas.Esa situación descoloca a muchos ganaderos que se ven forzados as desprenderse de parte de su stock porque no pueden darle de comer de modo adecuado.
Según Ravettino, sumados los doce últimos meses se faenaron 12,8 millones de cabezas, casi 900.000 cabezas más que el acumulado a marzo de 2017. “La sequía ha incidido en este contexto, volviéndose a observar una elevada participación de hembras en el total sacrificado. Orilló el 45%», precisó.
Según el industrial, “la seca afectó mucho y vamos a tener problemas con la materia prima. También observamos que los animales se están liquidando antes de tiempo, además de liquidarse hembras y también terneros que no llegaron al kilaje necesario”.
La mayor oferta de animales ha impactado severamente sobre los precios que cobran los ganaderos. Schiariti precisó que «por el efecto sequía en el tercer mes del año el precio de la hacienda en pie comercializada a través del Mercado de Liniers exhibió una importante corrección a la baja, con la cual casi anuló toda la suba observada durante febrero. El precio promedio disminuyó 7,8% mensual», indicó.
Respecto de marzo de 2017, es decir tomando en cuenta los últimos doce meses, el precio promedio de todas las categorías transadas en el Mercado de Liniers experimentó una leve suba de solo 3%, muy por debajo de los niveles de inflación.
«El efecto sequía modificó y podrá modificar el horizonte de la producción de prolongarse en el tiempo. Ya se manifiestan sus efecto en el rodeo y en los precios de la hacienda», lamentó el titular de Ciccra.