"Vamos a matar a Milei. Somos terroristas", había sido el mensaje que llegó al 911 el pasado viernes. Hoy cayó en la zona noroeste de la ciudad
Este martes, la Policía Federal detuvo en Rosario a un hombre de 30 años acusado de amenazar de muerte al presidente Javier Milei. La intimidación ocurrió el viernes pasado cuando el sospechoso realizó una llamada al servicio de emergencias 911, donde declaró: «Vamos a matar a Milei. Somos terroristas», según informó la Policía Federal.
La fiscal Julieta Eliana Militello, de la unidad federal del Área de Atención Inicial de Rosario, encabezó la investigación y ordenó al Departamento Unidad de Investigación Antiterrorista (DUIA) de la PFA realizar las pesquisas necesarias. Tras diversas tareas de campo, los agentes lograron identificar al responsable de la llamada y ubicar su domicilio en el Pasaje 730 (sin dirección suministrada por la PFA), en la zona noroeste, según información que publica el portal de noticias Rosario 3.
Con la autorización del juez de Garantías Marcelo Bailaque, se realizó un allanamiento en la vivienda del sospechoso, donde fue detenido y se le notificó la causa en su contra. Durante el operativo, los agentes incautaron dos teléfonos celulares, uno de los cuales fue utilizado para realizar la amenaza, además de documentos que podrían ser relevantes para la investigación.
Otra amenaza vinculada a Milei en Rosario
Esta detención se produce poco después de otro arresto relacionado con amenazas al presidente Milei. El 6 de octubre, la Policía Federal capturó al presunto autor de una serie de amenazas realizadas el 23 de agosto, cuando Milei visitó Rosario. En esa ocasión, se reportaron llamadas que advertían sobre la colocación de explosivos en el Aeropuerto Internacional «Islas Malvinas» y en la Bolsa de Comercio de Rosario, lo que obligó a las autoridades a evacuar ambos lugares como medida preventiva antes de un discurso que el presidente iba a dar en el marco del 140º aniversario de la Bolsa.
Las amenazas fueron neutralizadas, y la situación volvió a la normalidad antes del evento.