Los mensajes privados de Carles Puigdemont en los que admitió que el proceso independentista «ha terminado» dispararon la reacción de los partidos nacionales, opositores en Cataluña, que reclaman «proponer otro candidato» y tener «valentía» para admitir que todo fue una «farsa».
Uno de los más duros en su mensaje ha sido el portavoz del Partido Popular (PP) en el Congreso, Rafael Hernando, quien desde Madrid ha tildado a Puigdemont de “zombi político” y a la vez que ha celebrado que “reconozca su situación” al decir que le han “sacrificado” y que el ‘procés’ “ha caducado”.
Hernando opinó que lo que tiene que hacer ahora el presidente del Parlament, Roger Torrent, es “tomar nota y proponer a otro candidato”.
Y agregó, citado por el diario La Vanguardia: ”Yo creo que es evidente que Puigdemont, aunque él no lo sepa, es un zombi político desde hace mucho tiempo”.
Por su parte, el secretario de Organización del PSOE, José Luis Ábalos, ha señalado que el proceso independentista “no tenía una hoja de ruta muy definida y, sobre todo, muy responsable”.
A su parecer, los mensajes de Puigdemont y los “desencuentros del bloque independentista” demuestran que en el proceso había “intereses personales y de grupo, políticos electorales”, por lo que ha reprochado que los sacrificios que han pedido a la sociedad “son inversamente proporcionales” a los que están dispuestos a asumir.
”Puigdemont está en una empresa personal”, afirmó Ábalos, pero “los intereses de una persona no pueden condicionar el futuro de un pueblo”.
”Está claro que es un ‘procés’ con poco valor, poca decisión y una absoluta indefinición”, agregó, por lo que pidió a los independentista que dada “la incoherencia que existe, la irresponsabilidad y la escasa ejemplaridad que dan los dirigentes, asuman con realismo la situación” y “actúen con sensatez”.
Por su parte, la líder de Ciudadanos (Cs) en Cataluña, Inés Arrimadas, reclamó a los independentistas tras la difusión de los tuits de Puigdemont “valentía” para reconocer públicamente la “farsa” del «procés», que “está muerto desde hace mucho tiempo”.
En declaraciones a la prensa en los pasillos del Parlament, Arrimadas advirtió, además, que mientras “se mantenga la farsa” del proceso independentista y “una república imaginaria que no existe”, se seguirá “haciendo mucho daño” a Cataluña y a sus instituciones.