Además del riesgo a contagiarse, los médicos o enfermeros deben enfrentar situaciones estresantes o de violencia, también de acoso o estigmatización por estar en la primera línea contra la Covid-19
Desde hace más de un año los médicos y enfermeros de todo el mundo trabajan contra la pandemia del coronavirus a sol y sombra. Sobre sus hombros recayó una carga de trabajo y social nunca antes vista lo que los llevó a jornadas extensas en los efectores de salud y meses sin descanso, fundamental para la recuperación necesaria para continuar salvaguardando la salud de la población.
Además del riesgo a contagiarse (el 10% de los casos son trabajadores de la salud), deben enfrentar situaciones estresantes o de violencia, también de acoso o estigmatización por estar en la primera línea contra la Covid-19. «Todo eso repercute adversamente en la salud mental y en el bienestar de los trabajadores sanitarios», advierte la Organización Mundial del Trabajo (OIT), un organismo dependiente de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
En un video que expone esta situación la OIT explicó por qué es importante apoyar el resguardo de la salud mental de los enfermeros, médicos y especialistas que combaten contra la pandemia.
«La presión sobre los trabajadores sanitarios provoca estrés, ansiedad, insomnio, depresión, trastorno por estrés postraumático o suicidios», señala el video y agrega que estos inconvenientes «pueden mermar el rendimiento, provocar bajas laborales y aumentar las renuncias», lo que conlleva a aumentar las deficiencias «ya existentes» en el sector.
Por eso, la OIT exige que «las medidas de apoyo para prevenir o tratar el estrés y la salud mental de los trabajadores sanitarios deben formar parte de las actividades de respuesta frente a la Covid-19».
Mirá el video acá: