En comunicación con CLG, Omar Abramo, presidente de la entidad lucifuercista, habló de la actualidad de la Mutual y analizó la realidad que se enfrentan sus afiliados
Un día como hoy pero hace 54 años, la Mutual Luz y Fuerza de Rosario se constituía como tal y comenzaba un camino de trabajo, acompañamiento, solidaridad y esfuerzo para todos los afiliados al sindicato lucifuercista local. Todo comenzó cuando un grupo de trabajadores fueron por la creación de una entidad que beneficie a la sociedad y a los integrantes del gremio. Años más tarde, con la Mutual en pleno funcionamiento, se convirtió en un punto de esperanza para muchos. “Mandamos un saludo especial y seguido con un mensaje de esperanza, porque nosotros a pesar de las dificultades que se presentan nosotros estamos desde el 68, pasamos muchas crisis y siempre estamos presentes para apoyar a la sociedad”, dijo en diálogo con CLG el actual titular de la Mutual, Omar Abramo.
El balance del último año de la Mutual se centró, según indicó el presidente de la entidad, en la “recuperación económica que se veía a principio de año” debido a que los asociados “se acercaban para pedir ayuda económica para sus actividades”. Aunque, sin desentenderse de la realidad nacional, Abramo notó que “la capacidad de ahorro que tenían nuestros asociados bajó mucho y le cuesta muchísimo enfrentar cualquier proyecto”.
De todas formas, el mutualista aseguró que hay “tasas de interés acorde a nuestra actividad” y que si algún afiliado “tiene problemas para afrontarlo, tratamos de ayudarlo”.
Mirando al futuro y camino a los 55 años, Abramo afirmó que la Mutual analiza la situación “política-económica a nivel nacional y mundial” debido a que a lo largo de este año tuvieron reuniones con otras entidades que analizan los informes del Fondo Monetario Internacional, “donde se advierten crisis inflacionarias a nivel global”, reveló.
“Tenemos que estar atento para no estar endeudado y fijar proyecciones de crecimiento. Estamos en una etapa de transición”, explicó, no obstante y rápidamente, agregó: “Encima el año que viene es eleccionario en Argentina y Santa Fe. Así que estamos expectantes”.
Por último, recordó que la Mutual de Luz y Fuerza mantuvo muchas actividades a favor de la producción pyme, con la conformación de un fondo común para “quienes la estén pasando mal”. En la misma línea mencionó ayudas a comedores y merenderos.
En otro orden, apuntó que forman parte “de la iniciativa contra el lavado del activo, que es una necesidad que alcanza a todo el mundo y está estrechamente vinculada con el narcotráfico”.
La historia anterior a ese 1º de agosto de 1968, muestra que afiliados a Luz y Fuerza Rosario forjaron la Caja de Ayuda Económica, iniciando sus actividades en el local sindical de calle Entre Ríos 982. Pero pasado un tiempo y en la necesidad de buscar un marco legal, nace la Mutual de Luz y Fuerza de Rosario junto a su Primer Consejo Directivo.
Al ver crecer el trabajo la institución adquiere un local propio en calle Presidente Roca 1132, donde a partir del 25 de setiembre de 1979 continuó con sus actividades. Si bien tuvo que regresar a la sede sindical, ya en Paraguay 1135, logró reponerse y volver a adquirir inmuebles en Bv. Segui 4037 y España 1183 donde hoy funciona la Obra Social de la Federación de Trabajadores de Luz y Fuerza (OSFATLY).
Ya a fines del siglo pasado, en mayo de 1997, la Mutual compró los terrenos de Corrientes 1551 para construir el edificio 1º de Agosto. Tras la crisis del 2001, la Mutual apostó por más y se hizo del inmueble de Paraguay 1280 donde actualmente se concentran las actividades de la Óptica Mutual con profesionales en óptica y contactología de primer nivel, como así también la más moderna tecnología.
Ya en 2008, el local se expandió para formar Mutual Hogar, un espacio donde los socios pueden adquirir electrodomésticos y otros productos de las mejores marcas para su hogar, con una buena financiación.
En agosto del 2016, la Mutual logró un convenio con el Banco Credicoop para lanzar Fraterna, una tarjeta de crédito con identidad mutual donde conjuntamente con esta entidad se realizan acciones solidarias. Además, la entidad ofrece servicios permanentes como subsidios por fallecimiento, nacimiento, casamiento, asesoría legal y contable, ayuda escolar, la donación de insumos a nuestros jubilados y a la obra social.
También supo instalar un termotanque solar y paneles fotovoltaicos en el comedor y copa de leche Las del Hindú, en Granadero Baigorria, donde asisten a más de 200 chicos con sus familias.
En 2020, la llegada de la pandemia transformó el trabajo de la Mutual, pero el propio Abramo aseguró que la adaptación a la virtualidad fue inmediata y se siguió atendiendo: “La gente estaba acostumbrada a venir acá y hacerse atender y de golpe nos tuvimos que adaptar a los sistemas electrónicos, siempre dando servicios como ayuda económica, la óptica y la mutual de hogar y siempre mejorando”.