Gabriela mansilla, madre de Luana, estuvo en la ciudad. Además, a fin de mes esta historia llegará al cine con un elenco que tiene a figuras como Eleonora Wexler y Juan Palomino
Gabriela Mansilla, madre de la primera niña en el mundo en recibir su DNI acorde a su identidad de género sin pasar por la justicia, visitó Rosario este martes para seguir concientizando sobre la necesidad de acompañar las infancias y adolescencias travesti trans.
Mansilla brindó además un taller organizado por el Sindicato de Trabajadores Municipales de Rosario para que todos los asistentes puedan escuchar la historia de Luana y Gabriela, pero también despejar dudas y conocer información.
“Estoy profundamente agradecida porque esto es una decisión, más allá de que sea la obligación de todos los espacios de acompañar y generar un contexto sumamente agradable y abrazador para las niñeces. Muchas veces no se conoce hasta dónde llegan las responsabilidades que tiene cada espacio y cada agente ejecutor de ese espacio. Las niñeces travestis y trans están hoy totalmente expulsadas, por más que tengan el amparo de la Ley de Identidad de Género. Es por esto mismo, por la falta de información y porque no se sabe cómo acompañar. Hay desconocimiento, miedo y mucho prejuicio”, destacó Mansilla.
La historia de la hija de Gabriela está plasmada en el libro que publicó, titulado Yo nena, yo princesa. Luana, la niña que eligió su propio nombre. El 28 de octubre esa historia llegará a la pantalla grande de los cines del país, con un elenco que tiene a figuras como Eleonora Wexler y Juan Palomino. Es una ventana más para difundir información. «Además de ser una historia de amor, va a servir para que muchas familias se sientan identificadas. Hay que salvarle la vida a un montón de niñeces», señaló Mansilla.
Mansilla es fundadora de Infancias Libres, una asociación civil pionera de acompañamiento a infancias y adolescencias travestis trans y a sus familias. En ese marco han realizado diferentes relevamientos para poder tener cuantificado el escenario actual. “Con Infancias Libres realizamos la primera estadística a nivel nacional. La hicimos en el año 2019 con 100 experiencias de familias y ahora la actualizamos con 200. Tiene datos muy preocupantes. Más del 80% de los profesionales de la salud no saben cómo acompañar; el 70% de las escuelas tampoco. Siempre teniendo en cuenta que entre el año y los cuatro años tenemos las primeras manifestaciones de disconformidad con el género asignado al nacer”, detalló.