La Cámara Federal ordenaron la falta de mérito para el ex titular del Somu y de otras personas allegadas
La Sala 1 de la Cámara Federal revocó este martes el procesamiento por lavado de dinero del ex titular del Sindicato de Obreros Marítimos Unidos (SOMU) Omar «Caballo» Suárez, así como de otros imputados en la misma causa, ante la falta de pruebas.
Se trata de una investigación que se desprendió de la causa original por asociación ilícita por varios hechos cometidos durante la gestión de Suárez en el sindicato y que apuntaba a manejos financieros de empresas atribuidas tanto a él como a su entorno.
El tribunal dio marcha atrás con los procesamientos que en primera instancia había impuesto el juez federal Rodolfo Canicoba Corral a Suárez, al sobrino, al ex tesorero del sindicato, y a los dueños y responsables legales de la empresa Maruba SA.
Los jueces Leopoldo Bruglia, Pablo Bertuzzi y Mariano Llorens impusieron la falta de mérito, que implica que no hay elementos para procesar a los acusados, pero tampoco para desvincularlos.
En su denuncia original, la ex interventora del sindicato durante el macrismo, Gladys González, acusó a Suárez de haberse quedado con dinero del gremio a través de empresas controladas por personas de su entorno, como la Fundación Azul, para el cuidado y la preservación del medio ambiente marino, fluvial y lacustre; Marítima Maruba SA; Mercantes SA; Pescamarine SA y San Jorge Marítima SA. Por ello, existe una causa principal por asociación ilícita, pero también se abrieron otras investigaciones.
Entre los hechos de presunto lavado de dinero, se investiga una supuesta maniobra encabezada por Suárez, que habría utilizado a gente a su cargo para, a través de la firma Mercantes S.A, adquirir el 20 por ciento de la empresa Maruba, por 4.224.800 pesos.
Para Canicoba Corral, el lavado era producto del origen ilícito de ese dinero, que provenía de la extorsión que ejercía Suárez sobre determinadas empresas.
La Cámara reprocha que el juez sólo acreditó eso con un registro en asientos contables de la firma Maruba y no evaluó «adecuadamente dicha información». Incluso, recordó que el magistrado ordenó un peritaje contable para corroborar eso aún sin concluir.
«A criterio de esta Sala, la argumentación desarrollada por el magistrado de grado al respecto no alcanza -de momento- para sostener, con el grado de probabilidad que es propio del estadio procesal que transita este legajo, que la suma de más de cuatro millones de pesos -a la que se alude- haya sido introducida en el mercado a través de la operación de compra venta de las acciones antes referenciada», concluyó la Cámara.