Política y Economía

Movilización sindical

La Iglesia despegó al Papa de la misa con los Moyano en Luján


El arzobispo de Mercedes-Luján, Agustín Radrizzani, aseguró hoy que el Papa Francisco «no tuvo ninguna injerencia» en la misa que él ofició el sábado pasado en el marco de la movilización a la Basílica de Luján encabezada por el líder de Camioneros, Hugo Moyano, de la que también participaron dirigentes kirchneristas.

Luego de que el secretario adjunto de Camioneros, Pablo Moyano, afirmara que la marcha y la celebración «no se podrían haber hecho sin la venia» del Papa, monseñor Radrizzani descartó esa posibilidad.

«(Francisco) no ha tenido ninguna injerencia, la decisión de realizar la celebración fue mía», aclaró el arzobispo en un comunicado, luego de que trascendiera el descontento del Gobierno con los dichos de Moyano sobre el supuesto apoyo del Papa a la marcha.

Además, el prelado afirmó que no hubiese sido «pertinente» rechazar el pedido que le hicieron los dirigentes gremiales de realizar la misa en Luján y dijo que celebró «la intención de rezar por la paz, el pan y el trabajo» que tuvo la convocatoria.

«Mi propósito, expresado en la homilía, fue propiciar una súplica confiada a Dios para favorecer un clima de diálogo que nos ayuden a superar las dificultares que sufren muchos argentinos. Nunca tuve la intención de apoyar ni a un partido, ni a una ideología, ni a personas concretas», resaltó Radrizzani, quien en su mensaje ante los Moyano, referentes peronistas y de las organizaciones sociales, hizo un duro diagnóstico sobre la situación económica.

Por su parte, el titular de la Conferencia Episcopal Argentina (CEA) y obispo de San Isidro, Oscar Ojea, desmintió absolutamente» que Francisco haya estado detrás de la misa de Luján.

«No estamos acá tomando un partido o aprobando conductas. Si a un sacerdote le piden una misa por ‘pan, paz y trabajo’, debe acomodarse y celebrarla», subrayó el titular de la CEA en declaraciones a Perfil.

Y agregó: «El Papa no tiene informes diarios sobre lo que hacemos en la Conferencia Episcopal, porque no tiene tiempo. No tengo la menor idea si el Papa estaba informado de esta entrevista. Y quiero desmentir absolutamente que el Santo Padre esté manejando cosas de este tipo. Somos nosotros los que vemos cuál es el camino que facilita la promoción del diálogo».

Este domingo, Pablo Moyano indicó que el sector tiene «una muy buena relación con el Papa Francisco» y consideró que «sin dudas no se podría haber hecho esta movilización en la Basílica de Luján sin la venia de él».

El dirigente de Camioneros señaló que «el Papa está preocupado por esta desgracia que tenemos como modelo económico que suma cada vez más pobres y desocupados a través de la inflación».

En medio de la polémica por los gestos de la Iglesia a los Moyano, también el ex diputado Julián Domínguez -uno de los organizadores de la convocatoria- también afirmó que Jorge Bergoglio «no tuvo nada que ver» con la organización de la misa y que fueron los dirigentes gremiales que integran el Frente Sindical quienes pidieron realizarla.

«Fue una misa solicitada por el Frente Sindical. Francisco no tuvo nada que ver con la organización de esto, fue un pedido nuestro», señaló Domínguez, ex presidente de la Cámara de Diputados, en diálogo con Radio La Red.

De la movilización participaron los integrantes del Frente Sindical para el Modelo Nacional, como Sergio Palazzo (Bancarios), Ricardo Pignanelli (Smata), Hugo Yasky (CTA), Roberto Baradel (Docentes) y Walter Correa (Curtidores).

También estuvieron Daniel Scioli, Eduardo «Wado» De Pedro, Fernando Espinoza, Vanesa Silley (FpV), Felipe Solá, Daniel Arroyo (Frente Renovador) y los intendentes de Merlo, Gustavo Menéndez; de Ituzaingó, Alberto Descalzo; de La Matanza, Verónica Magario; de San Martín, Gabriel Katopodis, y de Malvinas Argentinas, Leonardo Nardini; entre otros.