Con la idea de pasar un día en familia, una mujer de 51 años y sus dos hijos transitaban este sábado por el Camino de las Altas Cumbres de Córdoba. A la altura del kilómetro 36 de la ruta E-34, Jaqueline M. perdió el control de su vehículo y cayó a un precipicio de 80 metros.
La camioneta EcoSport en la que circulaban colisionó contra una piedra, se rompió y desbarrancó. A pesar de que las tres personas que viajaban en el vehículo tenían el cinturón de seguridad abrochado, sufrieron golpes muy fuertes y quedaron atrapados.
Galo, el mayor de los hermanos que viajaba en la zona de adelante del vehículo sufrió un fuerte traumatismo de cráneo, mientras que Ivo, el más chiquito, pudo salir de la camioneta y, sin dudarlo, empezó a escalar una montaña en busca de ayuda para su familia. El pequeño de 9 años se cruzó con una pareja que se encargó del rescate de Jaqueline y Galo.
Accidente en las Altas Cumbres: una camioneta desbarrancó con una mujer y dos niños a bordo
“Ivo dice que volaron en el aire y que quedaron atrapados por unas piedras, a unos 100 metros. Un lugar donde es todo roca y pastizal. Y que él, descalzo, todo ensangrentado porque tenía cortes en la cabeza, logró llegar arriba, y pidió ayuda”, relató Cayetano, un amigo de la familia a los medios, y expresó: «La verdad es que ha sido un milagro, y un milagro con suerte».
Por su parte, un bombero socorrista de Mina Clavero que participó en el operativo de rescate, dialogó con Cadena 3, Marcelo Tobares, y destacó la importancia del accionar del menor. «Si no fuese por el gran héroe de esta historia es probable que ese vehículo hubiera quedado abajo».
«Nosotros desde que montamos el operativo en el lugar nos costó mucho llegar, es una zona muy complicada, de pendiente pronunciada, de pantano y nos costó ver por dónde llegar de manera más efectiva al vehículo», explicó.
El socorrista se mostró impresionado por lo realizado por el niño. «Él sube descalzo y obviamente por el shock y la situación que estaba viviendo, pero en el afán de ayudar a su mamá y al vehículo logra salir y dar aviso», afirmó, y agregó: «Cuando llego veo a un pequeño superhéroe».
A pesar de que ambos niños están estables y fuera de peligro, Galo se llevó la peor parte: “Es el que está más complicado. Entró a cirugía porque tenía un traumatismo de cráneo y le hicieron un drenaje. Le sacaron el respirador. Y está estable”, relató Yanina, la hermana mayor de la familia.
Por su parte, Jaqueline fue operada producto de las lesiones que el accidente le produjo en su cuerpo y se recupera favorablemente en una clínica de Córdoba.