Los abogados del ex vicepresidente Amado Boudou, señalaron este martes que la acusación por cohecho y negociaciones incompatibles con la función pública por la compra-venta de la ex Ciccone Calcográfica carece de pruebas, por lo que pedirá su absolución.
El alegato tuvo lugar en los tribunales de Comodoro Py donde los abogados Alejandro Rúa y Graciana Peñafort señalaron que la acusación «no probó lo que tenía que probar», que es que Boudou se interesó a través de su amigo, el empresario José María Núñez Carmona, por la compra de Ciccone.
Boudou siguió de cerca la audiencia pues estaba presente en la sala AMIA de los tribunales de Comodoro Py, donde sus abogados reclamaron la nulidad del alegato de la Oficina Anticorrupción (OA) y que se aparte del caso a la Unidad de Información Financiera (UIF) como querellante. Según sostuvo la defensa, la nulidad del alegato de la OA está dada porque sus abogados leyeron el alegato cuando el Código Procesal Penal de la Nación lo prohíbe.
Respecto a la UIF, que solicitó que en caso de condena a Boudou vaya preso de manera inmediata, reclamó se la aparte como querellante porque no pidió condena por lavado de dinero, cuyo delito se encarga de investigar el organismo. «Las acusaciones se basaron en la relación de Boudou con Núñez Carmona, que son amigos, pero nada se probó de que Boudou haya cometido alguna irregularidad», sostuvo la defensa en el alegato.