Este lunes más de una docena de testigos desfilarán por la fiscalía, entre ellos 4 enfermeros, un kinesiólogo, dos cardiólogos, un psiquiatra, un sociólogo y dos "prenseros"
Por Diego Recchini – Télam
Otros cuatro enfermeros que atendieron a Diego Maradona en la casa de Tigre donde falleció hace ocho meses, el kinesiólogo que advirtió que estaba hinchado días antes de su muerte, dos cardiólogos, un psiquiatra, un sociólogo y hasta dos «prenseros» que trabajan para el abogado Matías Morla, serán algunos de los 13 testigos que a partir del lunes comenzarán a desfilar por la fiscalía para reactivar la causa tras la feria judicial.
Se trata de varias declaraciones testimoniales que quedaban pendientes y que fueron solicitadas por las partes luego de las indagatorias que fueron tomadas en junio a los siete profesionales de la salud que están imputados en el expediente por «homicidio simple con dolo eventual».
«Algunos son testigos de descargo propuestos por las defensas, otros fueron pedidos por los particulares damnificados y otros directamente fueron convocados por los fiscales», dijo a Télam una fuente judicial ligada al equipo de investigadores coordinado por el fiscal general de San Isidro, John Broyad, e integrado por sus adjuntos Cosme Iribarren y Patricio Ferrari, y por la fiscal de Benavídez, Laura Capra.
Todas las testimoniales serán tomadas desde el lunes en la sede de la Fiscalía General de San Isidro, ubicada en la calle Acassuso 476.
Conforme la situación epidemiológica y a los recaudos que hay que tomar por la pandemia del coronavirus, solo los fiscales y los testigos estarán de manera presencial, mientras que los abogados de las partes que quieran escuchar e interrogar al declarante lo harán de forma remota mediante un sistema de videollamada.
De la lista de 13 testigos con el cronograma establecido por los fiscales, los primeros cuatro son enfermeros que cuidaron a Maradona otros días distintos al del fallecimiento y que no quedaron imputados como sus compañeros Ricardo Almirón (38) y Dahiana Gisela Madrid (36), por haber estado en las horas previas al deceso.
La primera en declarar el lunes, a las 11, será Cinthia Elizabeth Córdoba, quien atendía a Maradona los fines de semana, pero también lo cuidó en su primera noche de internación domiciliaria en la casa del barrio privado San Andrés de Tigre, el 11 de noviembre del año pasado, día en el que fue externado de la Clínica Olivos, donde había sido sometido a una neurocirugía.
Córdoba, además, es la pareja de Mariano Ariel Perroni (40), el coordinador de enfermeros de la empresa «Medidom» y uno de los imputados en la causa.
La segunda testigo del lunes será la también enfermera de los fines de semana Daiana Loreley Cáceres, quien fue citada en la fiscalía para las 13.
El miércoles será el turno de otros dos enfermeros, y el primero, para las 11, es Aldo Nelson Arnez Zenteno, quien también trabajó en la casa alquilada para Maradona los días de fin de semana.
A las 13 del mismo día, fue citada Tamara Débora Mansilla, quien hizo una sola guardia de ocho horas durante la segunda noche de Maradona en la casa y luego no fue convocada más porque, según confiaron a Télam fuentes de la investigación, la también imputada y psiquiatra Agustina Cosachov (36) le pidió el coordinador Perroni que haya menos gente y le solicitó turnos de 12 horas para Madrid y Almirón porque supuestamente con ellos Diego tenía más afinidad.
La primera testigo del jueves, a las 11, será Nelsa Marlin Pérez, quien nunca tuvo contacto con Maradona pero es la jefa de enfermería de la empresa «Medidom» a la que pertenecían todos los enfermeros, que a su vez es la superior jerárquica del coordinador Perroni y quien creó el grupo de chat de WhatsApp «Tigre», donde los enfermeros reportaban las novedades.
El segundo turno del jueves, a las 13, fue reservado para un testigo que podría ser clave en el expediente, el kinesiólogo Nicolás Esteban Taffarel, más conocido como «Taffa», que es cuñado del abogado Víctor Stinfale y quien en el último año visitaba y tenía un trato frecuente con Maradona por sus problemas de movilidad.
Varios son los mensajes de audio incorporados a la causa de Taffarel hacia el principal imputado, el médico de cabecera de Maradona, Leopoldo Luque (39), donde el kinesiólogo demuestra su preocupación por el consumo de alcohol y hasta de marihuana del «10» en la época en la que vivía en la casa de Brandsen.
Pero además, «Taffa» advirtió unos días antes del fallecimiento que el excapitán de la selección argentina campeona en México ’86 estaba «hinchado», uno de los signos del edema pulmonar que le causó la muerte.
«Estaba muy hinchado Leito. Imaginate que lo vi hinchado con la luz apagada, no lo quería ver con la luz prendida», le dijo el kinesiólogo a Luque el 17 de noviembre pasado, ocho días antes del deceso, mientras que el mismo día de la muerte, le reprochó en otro mensaje: «La semana pasada les dije que había que levantarlo porque podía hacer un edema de pulmón».
El viernes próximo será el turno de dos cardiólogos propuestos por la defensa de Luque, que evaluaron a Maradona en chequeos anteriores y supuestamente no detectaron riesgos cardiológicos: a las 11 fue citado Sebastián Nani, de la Clínica Olivos, y a las 13 Oscar Alberto Franco, de la clínica Ipensa de La Plata.
El lunes 9 de agosto fueron citados tres testigos del entorno de Morla: a las 11 irá Federico Gallegos que, según fuentes judiciales, es un experto en telefonía contratado por el abogado; a las 13, Sebastián Sanchi y, a las 15, Edgardo Moreno, ambos encargados de prensa del ex apoderado del «10», a quienes algunas partes acusan de montar «operaciones de prensa» o filtrar información a algunos medios.
Los últimos dos testigos programados fueron propuestos por la defensa de Cosachov, irán a la fiscalía el 11 de agosto y son el también psiquiatra José Capece, con quien la imputada hacía interconsultas sobre el tratamiento de Maradona, e Ignacio O’Donnell, sociólogo y experto en salud mental y adicciones.