Los incrementos rondan el 10% y responden a las subas que se llevaron a cabo en hacienda. Además, en febrero el consumo se derrumbó
La carne, uno de los alimentos más requeridos por los argentinos, se ha transformado en un bien cada vez más inaccesible. En los últimos 10 días, los precios aumentaron en dos ocasiones, superando los $10.000 por kilo en cortes como el asado y el vacío. Estos incrementos, que rondan el 10%, responden principalmente a las subas que se registraron en el precio de la hacienda, con un aumento cercano al 7%, el cual se trasladó directamente al mostrador.
Los consumidores, cada vez más afectados por el aumento en los precios, están adaptando sus compras a las ofertas, buscando minimizar el impacto en sus bolsillos.
En cuanto al consumo, el mes de febrero registró una caída significativa del 9,8%. Al momento de intentar organizar un asado, los precios sorprenden: el kilo de asado ronda los $10.000, el vacío supera los $12.000, la entraña alcanza los $19.500, y el matambre se encuentra en torno a los $10.000. Estos incrementos son solo algunos de los ejemplos de la difícil situación que enfrentan los consumidores al intentar acceder a estos cortes.
«La carne subió bastante, un 10%, y ya nos avisaron que esta semana subirá entre un 5% y 8% más», contó un carnicero. Aunque no se especificaron los días exactos de la nueva suba, se espera que los incrementos impacten entre jueves y viernes. En cuanto a las razones detrás de los aumentos, el comerciante explicó que los factores son diversos, pero destacó la influencia de la situación de la hacienda, la escasez de agua y las condiciones de los animales. A pesar de los aumentos, el carnicero aseguró que intentan no trasladar todo el impacto a los precios para poder mantener a la clientela.
Por otro lado, la Cámara de la Industria y el Comercio de Carnes (Ciccra) informó que el consumo per cápita de carne bovina en enero de 2025 fue de 47 kg/año, lo que representa el valor más bajo en los últimos 30 años. En comparación con el año pasado, la caída fue del 3,2%. Esta disminución en el consumo refleja la pérdida de poder adquisitivo de los salarios, que se ha visto deteriorado significativamente entre noviembre de 2023 y diciembre de 2024. Según el Índice de Salario del INDEC, el promedio ponderado de los salarios registra una retracción real del 8,4% durante el primer año de gobierno de Javier Milei.