El gobierno argentino expresó hoy su «gran preocupación» por las informaciones que indican que existió un ataque con armas químicas el pasado 7 de abril «contra la población civil, en particular mujeres y niños, en la ciudad de Duma, República Árabe de Siria».
Al respecto, la Cancillería manifestó las «profundas condolencias» del país «a las víctimas y a sus familiares».
«Ante ello, el Gobierno argentino expresa su firme convicción que este ataque debe ser debidamente investigado y confía en las medidas que la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OPAQ) despliegue para verificar la utilización de armas químicas y poder determinar los responsables a fin que puedan ser llevados ante la justicia», señaló el Ministerio de Relaciones Exteriores.
En un comunicado, sostuvo que «la Argentina reitera que la utilización de armas químicas, bajo cualquier circunstancia y por cualquier actor, es inaceptable y constituye una violación manifiesta de las obligaciones internacionales emanadas de la Convención sobre las Armas Químicas y del derecho internacional».