Apyme Santa Fe alertó sobre el derrumbe del entramado productivo provincial. Desde noviembre de 2023, se perdieron más de 12 mil puestos de trabajo. Mientras tanto, las importaciones alcanzan el nivel más alto en 22 años
La Asociación para la Pequeña y Mediana Empresa (Apyme) de Santa Fe presentó un nuevo informe que refleja con crudeza el impacto de las políticas económicas del gobierno nacional sobre la producción y el empleo. El documento, elaborado por el Observatorio de Importaciones, advierte una caída del 2% en el empleo industrial, el cierre de más de dos mil empresas y un crecimiento récord de las importaciones, que ya representan el 31% del PBI, el porcentaje más alto en más de dos décadas.
“Lo único que crece son las importaciones”, sintetiza el informe, que atribuye la situación a la apertura comercial indiscriminada y a la falta de políticas activas para sostener la producción local.
Fábricas que cierran, empleos que se pierden
Desde noviembre de 2023, en Santa Fe cerraron 2.020 empresas, de las cuales 225 son manufactureras y 82 pertenecen a cadenas industriales clave como la automotriz, la línea blanca, el calzado y la maquinaria agrícola. El derrumbe afecta directamente al empleo: la provincia perdió 12.456 puestos registrados, y más de la mitad de esa caída corresponde a la industria manufacturera.
Las cadenas relevadas por el Observatorio muestran una caída del 5,8% del empleo, lo que implica 3.145 trabajadores menos. Los sectores más golpeados son línea blanca (832 empleos menos), maquinaria agrícola (730), automotriz (708) y materiales para la construcción (530).
“Estos números reflejan el efecto directo del modelo aperturista y desregulador que está arrasando con la industria nacional y con las pymes, que son las principales generadoras de empleo genuino”, advirtieron desde Apyme.
Importaciones récord, producción en retroceso
En contraposición a la caída del empleo y del nivel de actividad, el informe muestra que las importaciones de bienes finales o de consumo aumentaron un 86% respecto a enero de 2024. En cambio, los bienes intermedios, necesarios para la producción local, sólo crecieron un 27%.
“La distinción es clave —subraya el documento— porque la importación de insumos puede impulsar la producción local, pero la de bienes finales directamente compite con la industria nacional.”
El informe detalla que el peso de las importaciones en el PBI alcanzó un 31% promedio en 2025, el valor más alto de los últimos 22 años, y seis puntos por encima de 2024. “Durante el último período de apertura comercial (2016-2019) el indicador había sido del 30%”, agrega Apyme, estableciendo un paralelismo con el modelo del macrismo.
El tipo de cambio y el freno productivo
El Observatorio también advierte que el tipo de cambio se deprecia respecto de comienzos de 2025 y que la actividad económica sigue estancada, con un crecimiento marginal en agosto producto de la desaceleración de las importaciones. “Se configura un escenario de caída de la producción, menor empleo y mayor dependencia externa”, sostiene el estudio.
“Un modelo que destruye valor nacional”
Desde Apyme Santa Fe apuntaron de manera directa contra las políticas económicas del gobierno de Javier Milei, a las que calificaron como un “industricidio en marcha”.
“El desmantelamiento de la estructura productiva nacional no es un daño colateral, sino una consecuencia buscada de un modelo que prioriza la especulación financiera y las importaciones por sobre el trabajo y la producción argentina”, sostuvieron.
Y concluyeron: “Cada fábrica que cierra y cada trabajador que pierde su empleo son parte del costo social de un proyecto que entrega el mercado interno y destruye valor nacional. Desde el sector pyme vamos a seguir mostrando estos números para exigir un cambio de rumbo que vuelva a poner de pie a la industria argentina”.