Rosario disfrutó a pleno las vacaciones de invierno. Entre el 6 y el 21 de julio, más de 300 mil rosarinos y turistas llegados desde distintos puntos de la provincia (y de provincias vecinas) coparon diferentes espacios y se deleitaron con las distintas propuestas organizadas por la Municipalidad de Rosario. Cabe destacar que varias de las actividades continuarán hasta el fin de mes en distintos puntos de la ciudad.
«Estamos orgullosos de la ciudad que construimos, en la que los niños y niñas tienen la posibilidad de disfrutar de sus vacaciones de invierno en los espacios municipales, igualando oportunidad y permitiendo que desde todos los barrios puedan acceder a una propuesta de calidad», destacó la intendenta Mónica Fein.
«Rosario ya es un ícono para el turismo de las familias, todos los que nos visitan destacan la oferta amplia, diversa e innovadora que tiene la ciudad para los más chicos. El gran trabajo realizado por nuestros equipos, por cada uno de los trabajadores de los distintos lugares y de la decisión de esta gestión se traduce en las 300 mil sonrisas que se diversificaron en cada rincón», finalizó.
Por su parte, el secretario de Cultura, Guillermo Ríos, señaló que “este año pensamos en una propuesta de vacaciones de invierno muy plural y accesible, que permitiera a rosarinas y rosarinos disfrutar de los espacios públicos con programaciones de calidad”.
“Estas vacaciones se han distinguido por una diversidad de propuestas en todos los distritos a partir del trabajo de las coordinaciones culturales de distrito; donde se profundizó el vínculo con vecinales, clubes e instituciones barriales y los auditorios se destacaron con propuestas para compartir en familia”, agregó Ríos.
La Comedia
El Teatro La Comedia este año recibió a 5.200 personas con dos propuestas: El Principito, obra de teatro y cine de animación con dirección de José Muñoz y Julio Panno, interpretación de Tomás Maino, ilustraciones de Milo Lockett y música original de Marcelo Andino; y Salvajada, una obra de Mauricio Kartun basada en el cuento Juan Darién de Horacio Quiroga, que conjuga actuación, danza, circo y plástica, y fue producido por estudiantes de las escuelas municipales de arte y museología.
El Tríptico
La Granja de la Infancia, El Jardín de los Niños y La Isla de los Inventos abrieron sus puertas para recibir a alrededor de 120 mil visitantes en sus espacios de juego, construcciones y poesía. Cada tarde recitales y espectáculos de clown, teatro, títeres, danza y circo se sumaron a las propuestas y dispositivos del Tríptico de la Infancia.
La llegada del hombre a la Luna
El 50º aniversario del primer alunizaje también se celebró en estas vacaciones. Por un lado, el Centro Cultural Parque de España recibió a 450 visitantes que disfrutaron de una programación espacial: De acá a la luna. Vacaciones para chicos del ’69, que incluía recitales, charlas y el mejor cine. Por su parte, en el Complejo Astronómico Municipal 6.500 personas se acercaron para ver una película sobre el alunizaje, cortometrajes de la cinemateca del Centro Audiovisual Rosario y visitar la muestra 22:56 Hora Argentina – Tierra en fase, sobre la Argentina de 1969, donde se esperaba con avidez las últimas noticias de la carrera espacial y la llegada del ser humano a la Luna.
Museos
En sus dos sedes, el Castagnino+macro recibió 4.000 visitas en sus talleres de vacaciones para niñas, niños y grandes. Por su parte, el Museo de la Ciudad, convocó a 400 personas con un Parque Explorado pensado para niñas y niños con una búsqueda del tesoro en el Rosedal, con Wladimir de vacaciones, un espacio para dibujar, escribir y aprender sobre Rosario y con una muestra de cortos y debate para aprender sobre el medio ambiente en el Invernadero. El Museo Estevez con sus talleres y obras de teatro reunió a 420 personas.
Centros culturales
Las vacaciones de Invierno también se vivieron en el Centro de Expresiones Contemporáneas donde aproximadamente 1.000 personas vivieron acústicos en el SUM, ciclos de cine, visitaron la Muestra Colectivo Ni Una Menos en el marco de Bienal Sur, obras de teatro, Ciclo Funky Fusion con el Movimiento Unión Groove (MUG) y una presentación de colección de indumentaria.
La Ciudad de los Niños, con su actividad Mañanitas en Ciudad, y el clásico de los domingos Descanso al paso, convocó a más de 3000 personas. Por su parte, el Centro Cultural Parque Alem, con sus funciones de teatro para niñas y niños, convocó a 300 personas.
El Centro Cultural Roberto Fontanarrosa abrió sus puertas con una propuesta para conocer más sobre la obra del dibujante y escritor: Los Clásicos según Fontanarrosa. Además, muestra de historietas y espectáculo taller con Oscar Salas. Reunió un total de 600 personas.
Centros Municipales de Distrito
Más de 18 mil vecinas y vecinos disfrutaron de las propuestas culturales en los diferentes barrios de la ciudad. Cine, muestras, circo, talleres, clases abiertas, espectáculos musicales, teatro, clown, magia, juegos, cuentos, títeres, encuentros de Hip Hop, Rap y Break dance. Además de los auditorios de los CMD, las actividades se realizaron en plazas, cooperativas, centros culturales, bibliotecas, vecinales, centros de convivencia barrial, cines y clubes.
Algunas de las propuestas destacadas fueron:
La carpa itinerante del área cultural del Distrito Centro, que estuvo en los barrios República de la Sexta y Latinoamérica. Donde vecinas y vecinos participaron de este proyecto cultural que tiene como objetivo aprender y disfrutar a través de múltiples propuestas lúdicas.
Y el Centro Cultural Cine Lumière, que convocó a espectadores de todas las edades para sus proyecciones de animaciones, estrenos recientes y películas clásicas; funciones de teatro y talleres.
El 9° Festival de Cine Infantil Ojo al Piojo! contó con la presencia de 1.200 niñas, niños y jóvenes que disfrutaron de proyecciones de cortometrajes en competencia, películas y charlas en Village Cines y en el Centro Cultural Parque de España. Se presentaron 110 cortometrajes provenientes de Alemania, Argentina, Chile, Colombia, Croacia, Cuba, Dinamarca, España, Estados Unidos, Francia, Indonesia, México, Holanda, Perú, Suiza, Taiwán y Uruguay. Además el festival recibió a 2 invitados de lujo: Juan Sklar y Fernando Salem.
Las bibliotecas de la ciudad también se sumaron a la programación de vacaciones: la Biblioteca Estrada programó funciones de teatro, títeres, música, actividades especiales para toda la familia y una muestra de ilustraciones convocando a 500 personas. Por otro lado, La Casa Imaginada: espacio para las infancias abrió sus puertas dentro de la renovada Biblioteca Argentina, como un espacio de lectura y espectáculos para compartir entre chicos y grandes. Con cuentos, canciones y teatro convocó a 1.500 personas.
Franja del Río
El espacio ubicado en la costa central contó con propuestas diversas que reunieron a más de 100 mil personas. En el Galpón 13 se trabajó en campañas colectivas y convocatoria de socios a La Mutualidad. El Galpón 15, El fabuloso mundo del cuerpo, fue escenario para galas de circo de la Escuela Municipal de Artes Urbanas y espectáculos de música, títeres y teatro. Y en el Galpón 17, se pudo visitar un rincón de juegos y libros para las infancias y el Mercado de Frutos Culturales.
Además de las Intervenciones artísticas, sets sonoros, dispositivos para dibujar y performances en el Galpón 11, hubo una propuesta especial llamada Invasión Poética. Intervención artística colectiva que contempló cuatro intervenciones que resignificaron el espacio a partir de obras que funcionan como disparadores de los artistas Luis Rodríguez, Valeria Traversa, Augusto Zanella y Sergio Lamanna. Se sumaron workshops y sets sonoro.
Ferias de invierno
Más de 40 mil personas pasaron pos las ferias de invierno que se ofrecieron en plaza Pringles y el Parque Nacional a la Bandera.
En el remozado espacio verde del Paseo del Siglo funcionó la Feria Artesanal de Invierno, en la cual más de 100 emprendedores locales pertenecientes a varias ferias de la ciudad ofrecieron para la venta accesorios y abrigos para esta temporada; las clásicas bombillas, mates, lámparas, billeteras, carteras, juguetes, joyas, cestos y canastos, cinturones, zapatos y zapatillas, cuchillos, tablas y vajilla de madera, tazas, macetas, juegos de ingenio, entre otros productos artesanales de productores y emprendedores locales.
Y en el Parque Nacional a la Bandera, otros 120 emprendedores sociales exhibieron para la venta sus producciones. Se trata de una feria especial que año a año se muestra como un clásico de las vacaciones de invierno para los rosarinos y quienes visitan la ciudad.