Por José Odisio
Frank Kudelka está en el ojo de la tormenta. La derrota ante Vélez no hizo más que ratificar el enojo de los hinchas por la preparación y el funcionamiento del equipo, y lo más llamativo es que, si bien reconoce su responsabilidad en la caída, mantiene una postura de buscar «excusas» válidas o no, para sacar de foco a los cuestionamientos sobre sus decisiones dentro de la cancha.
Perder con Vélez era una posibilidad, mucho más si se tiene en cuenta que Newell’s aún espera por tres refuerzos titulares y salió a la cancha con varios juveniles como Castro o Marcioni y otros debutantes como Capasso y Cabral. Pero hay responsabilidad de Kudelka en lo sucedido. El DT propuso una idea táctica que, como muchas otras veces, no encajó con el partido. Y lo que es aún peor, ese error inicial en los nombres y en la postura, tardó en corregirse, con cambios que tampoco fueron tan claros. La pretemporada no cambió la dinámica de Newell’s, y con un rival que corre como Vélez se nota más. Y quedó demostrado que ese punto no tiene que ver con la edad de los futbolistas que están en cancha. Kudelka mandó inexplicablemente a Maxi al banco. Y puso a Castro seguramente para tener más despliegue en colaboración de Cacciabue y Rivero. Y el partido le demostró que fue un error. Newell’s fue superado en el mediocampo todo el primer tiempo. Cacciabue y Rivero nunca entendieron su posición en la cancha, y corrió sin la pelota, lo que para un enganche es lapidario. Para peor, Nadalín y Bittolo se vieron superados en cada ataque, algo que debió corregirse desde el banco con la ayuda de los volantes.
Y ni hablar de la posición de Pablo Pérez, un error táctica de Kudelka que se expuso más con la expulsión. Pérez puede jugar de cinco? Sí, si lo hace con otros volantes cerca o con una postura más adelantada del equipo. En cambio, si se para como tapón cerca de los zagueros, queda expuesto a cometer infracciones y se aleja de la zona donde puede ser el iniciador de jugadas del equipo. Newell’s jugó sin enganche y tuvo a Pérrez a 70 metros de Scocco, lógicamente no se acercó al arco rival ni siquiera con un pelotazo. y la situación de PP8 expuso doblemente a Kudelka. Porque cuando lo amonestaron tempranamente, debió reemplazarlo, como lo hizo con Godoy Cruz y lo justificó en conferencia posterior, o sacarlo de esa posición de cinco y mandarlo de volante. Dos situaciones similares, dos decisiones distintas. Kudelka parece desconcertado.
Para peor, el ingreso de Maxi, con Newell’s en desventaja numérica, cambió la postura del equipo. La Fiera tomó el control de la pelota y permitió que Newell’s se acercara al empate. Falló él, desde una posición donde se equivoca poco. Y faltó un delantero más de área, porque el DT decidió sacar a Scocco, condenado a no jugar el primer tiempo por la lejanía de sus compañeros.
Faltan los refuerzos, tal vez esa sea la única excusa real que tiene Kudelka. Y seguramente con Escobar, Lema, Cristaldo y algún delantero más, la imagen cambiará. Aunque para que eso suceda, el entrenador deberá tener más claridad táctica. Enojarse menos con las críticas y poner esa energía en acomodar a un equipo, que por ahora es más de los mismo del torneo pasado.