La selección de Bielsa quedó eliminada en la primera ronda de Corea-Japón y a pesar de la urgencia de goles no los juntó en cancha
El Kily González fue uno de los volantes predilectos de la era de Marcelo Bielsa en la selección argentina que lo llevó al mundial 2002 de Corea-Japón. Ese torneo es recordado por todo el mundo futbolero ya que la albiceleste se quedó fuera en la primera ronda bajo algunas polémicas, como la imposibilidad de ver a Gabriel Batistuta y Hernán Crespo juntos.
«Sin ninguna duda Crespo y Batistuta podrían haber jugado juntos, pero nosotros moríamos con la idea de Bielsa. Eso era lo que nos había hecho llegar a donde llegamos», manifestó el Kily, en diálogo con radio Del Plata.
Batistuta y Crespo coincidieron en el seleccionado argentino durante dos Mundiales (Francia 1998 y Corea-Japón 2002), además de partidos por Eliminatorias y amistosos. Los entrenadores Daniel Passarella primero y Bielsa después, siempre eligieron un esquema basado en un solo número «9».
La selección de Bielsa quedó eliminada en la primera ronda de Corea-Japón y a pesar de la urgencia de goles no los juntó en cancha. Crespo, autor del empate, reemplazó a Batistuta a los 13 minutos del segundo tiempo.
El ex Rosario Central afirmó que sus charlas con Bielsa fueron «únicas» y que mantiene contacto con el actual entrenador de Leeds de Inglaterra. «Bielsa me ha dado muchas cosas desde lo personal y lo futbolístico; siempre voy a estar muy agradecido», concluyó González.