El gobernador bonaerense destacó el acuerdo con empresas por parte de la provincia para aumentar las dosis y consideró que la Ciudad de Buenos Aires "entró en una especie de campaña electoral salvaje"que hace que sea muy difícil gobernar"
El gobernador bonaerense, Axel Kicillof, aseguró hoy que la Provincia «consiguió millones de vacunas» y tras cerrar «acuerdo con empresas» se las transfirieron a la Nación «para que las distribuyera».
«La Provincia de Buenos Aires consiguió millones de vacunas.Esa es la verdad. Empezamos a trabajar muy temprano, hablamos con todas las empresas y cuando pudimos cerrar acuerdos que estaban prácticamente muy avanzados, se los transferimos a la Nación», indicó el mandatario provincial en declaraciones al programa «El Gíglico», que conduce Alfredo Scoccimarro por Radio Rivadavia.
En ese sentido, agregó: «Conseguimos millones de vacunas como provincia pero ¿Qué ibamos a hacer? ¿Comprarlas para usarlas en las provincias y que el resto del país no las tuviera? Siempre se pudo comprar, siempre estuvo habilitado por la ley explícitamente».
«Lo que nosotros hicimos fue buscarlas y cuando las conseguimos se las transferimos a Nación para que las distribuya por todas las provincias», remarcó.
Por otra parte, Kicillof sostuvo que la Ciudad de Buenos Aires «entró en una especie de campaña electoral salvaje» que hace que sea «muy difícil» gobernar.
El mandatario bonaerense se refirió así al enfrentamiento entre Ciudad y Nación por el cierre de las clases presenciales y consideró que el territorio porteño está bajo la conducción de Mauricio Macri.
«La Ciudad, bajo la conducción clarísima de Macri, hace un tiempo entró en una especie de campaña electoral salvaje. Se opusieron a las vacunas y a todo tipo de restricción», indicó Kicillof.
«Ellos quieren hacer campaña electoral y por eso se oponen a todo y así va a ser muy difícil. La última vez que nos reunimos (con Larreta), mientras teníamos las reuniones, por afuera Bullrich y Macri se oponían a las restricciones y Larreta firmaba comunicados», manifestó.
En tanto, aseguró que el Gobierno anterior no puso un peso ni en el sistema de salud ni en hospitales, por lo que todas las críticas al manejo de la pandemia son «hipócritas».
«Es una oposición rabiosa y despectiva con el presidente. Es algo muy peligroso. Se está jugando una batalla entre la vida y la muerte. Los dueños de las prepagas más importantes del país dicen por la tele que están desbordados», consideró.
Asimismo, se refirió a las nuevas medidas anunciadas por el Gobierno: «Las restricciones de la primera parte de la pandemia nos dieron tiempo para triplicar el sistema de salud y evitar que estallara. Muchos países de Europa pusieron restricciones para evitar el colapso de sus sistemas sanitarios. Eso hizo el Presidente, la verdad que no tiene mucha ciencia. Se está haciendo en todo el planeta».
«Los epidemiólogos dicen que para evitar que crezca el virus hay que bajar la circulación. Las medidas de restricción son la única forma que se conocen de evitar los contagios. Más porque ya tenemos adentro la cepa de Manaos y la de Gran Bretaña», subrayó el mandatario provincial.
En tanto, aseguró que «el sistema privado de la Ciudad atiende al 80% de los porteños y se quedó sin camas», en tanto que aclaró que la Provincia está «encantada de dar una mano con eso».
«La peor solución es buscar un conflicto permanente. No vamos a entrar en provocaciones. La sociedad está esperando que quienes tenemos responsabilidad de Gobierno intentemos cuidar a la gente», expresó.
Por último, se refirió a los colegios que anunciaron que abrirán el lunes pese a la prohibición: «No tengo en el radar que los lunes abran colegios en la Provincia. La conducción del sistema educativo es una decisión del Gobierno Nacional.
Seguramente habrá sanciones, pero no creo que sea algo que suceda».