Más de 1,5 millones de jóvenes de ONGs de todo el mundo pidieron ante las Naciones Unidas un fondo de 10 mil millones de dólares adicionales para garantizar educación a chicos marginados. Solicitaron también que esta petición se trate en la próxima reunión del G20 en la Argentina.
El pedido es apoyado por la Comisión Internacional para Financiar la Oportunidad Global de Educación, integrada, entre otras personalidades, por la primera ministra de Noruega, Erna Solberg, la ex presidente de Chile, Michelle Bachelet; la Directora General de la UNESCO, Irina Bokova; y el enviado especial de la ONU para la Educación, Gordon Brown.
En la petición se hace hincapié en que «Argentina, como sede de las reuniones del G20 de este año, puede dirigir los esfuerzos para abogar por este nuevo y mayor financiamiento para la educación», informaron voceros de la Comisión. Al acompañar este pedido, asegura que América Latina «enfrenta una crisis de aprendizaje que está creando una división amplia y persistente entre los niños que tienen acceso a las habilidades y las oportunidades, y los que no», y destaca que esto se nota en las pruebas Pisa.
Según el Informe de Seguimiento de la Educación en el Mundo de la Unesco, el 83% de los niños de las familias más ricas en esta región termina la escuela secundaria, en comparación con sólo el 29% de los niños de las familias más pobres. «Las tendencias en América Latina son parte de un problema global más grande. Si no se toman medidas, más de 400 millones de niñas no tendrán posibilidades de tener las capacidades necesarias para trabajar en 2030», remarcó la Comisión.
Voceros de la Comisión destacaron que el grupo de naciones del G20 «revisará el propuesto Fondo Internacional de Finanzas para la Educación durante sus reuniones de noviembre (en la Argentina) por lo que un respaldo del G20 será crítico para avanzar en la financiación».
Los jóvenes cuestionaron que «el progreso se ha estancado ya que la inversión no ha seguido el ritmo de la necesidad de fondos para la educación», y precisaron que «el apoyo internacional ha disminuido del 13% de todas las ayudas hace diez años a sólo el 10%». «Toda la ayuda a la educación combinada en los países en desarrollo ofrece solo USD 10 por niño, lo que no es suficiente como para pagar un libro de texto de segunda mano, y mucho menos una educación de calidad», sostuvieron en su petición.