El intendente habló tras el acto matutino por el Día de la Bandera y fue muy duro con el trato en tema Seguridad que Rosario recibe: "No tenemos policía, ni justicia, ni cárceles"
La agenda del 21 de junio en Rosario comenzó con el protocolar izamiento de la bandera en el Monumento Nacional a la insignia patria del que participaron Omar Perotti, gobernador de Santa Fe, y Pablo Javkin, el intendente de la ciudad. Desde las 9, el himno nacional fue acompañado por el Liceo Aeronáutico Militar e hijos de de ex soldados combatientes en Malvinas, que portaron la bandera nacional hasta el mástil.
Con una emotiva interpretación de “Aurora” a cargo de Soledad Pastorutti y Jorge Fandermole y del Himno Nacional a cargo de Itatí Barrionuevo, los presentes le rindieron homenaje a los Ex Combatientes de Malvinas, a 40 años de la guerra.
Sin autoridades nacionales, el primero en hablar fue el intendente Pablo Javkin que luego de saludar a los presentes hizo mención al General Belgrano: «Hace 210 años, Don Manuel Belgrano vino a hacer patria a la vera del Paraná. Eligió el caserío del Pago de los Arroyos, y se inspiró en los colores del cielo para que María Catalina y un grupo de mujeres confeccionarán el manto que flamea bien arriba, allí, en nuestro Monumento».
A partir de allí destacó los inicios de Rosario como ciudad, cuando aún se llamaba Pagos de los Arroyos, y luego enumeró algunas de las características que tiene hoy la Cuna de la Bandera: «Por el Paraná potente y correntoso, la Argentina manda su producción a cada rincón del planeta. Rosario es, aunque a muchos hoy todavía los sorprenda, el principal polo logístico agro exportador del mundo». Además, remarcó el sistema de salud pública al decir: «Es la ciudad de la salud pública más extensa y eficiente del país. Por si hacía falta demostrarlo, nuestro sistema soportó la peor pandemia, y gracias a la entrega y talento de sus trabajadores y trabajadoras, le salvó la vida a vecinos de Rosario y de toda la región».
«Rosario es una ciudad de gente de buen corazón, que cada vez que ve que un vecino sufre algún dolor, alguna injusticia, se une en una cadena de solidaridad que desborda», agregó el intendente y señaló la gran ayuda que recibió Nicolás, el niño que tiene que seguir su tratamiento en Barcelona.
En otro tramo del discurso, Javkin habló del flagelo de la inseguridad: «Pero esa Rosario, esta Rosario de la que sentimos orgullo, tiene un problema muy, muy grande. Esta ciudad, que quiere ser de paz, vive amenazada por bandas mafiosas que, con sus armas y su mugre, quieren que tengamos miedo y arrebatarnos la vida de nuestros pibes. Para combatir esta crisis necesitamos unión y decisión. Cuando escuchamos desde acá los gritos que llegan desde el centro del país, sabemos que no nos sirven, que no resuelven nuestro problema».
«Los rosarinos -añadió en el cierre de sus palabras- siempre pedimos que la única pelea que demos sea contra esos mafiosos que crecen a costa de la pobreza y la falta de oportunidades de nuestros chicas y chicas. Esta Rosario que no tiene policía, ni justicia, ni cárceles, necesita ayuda. Mucha ayuda. Pedimos con respeto pero también con energía que todo lo que se pueda hacer se haga, y urgente».