Espectáculos

El cine, de luto

Italia llora la muerte de la célebre actriz Valentina Cortese


La célebre actriz de teatro y cine italiana Valentina Cortese, recordada por sus papeles en filmes como «La condesa descalza» y «La noche americana», por la que fue nominada al Oscar por su papel secundario, murió a los 96 años en Milán, su ciudad natal.

Dueña de una singular belleza, comenzó su carrera en los repartos de películas italianas de la década del 40, incluso durante la Segunda Guerra Mundial, pero su nombre recién trascendió en la década siguiente.

De aquellos tiempos son «La amante de tres reyes» (1941); «La cena de las burlas» (1942), de Alessandro Blasetti, junto a Amedeo Nazzari y con Luigi Zampa, protagonista de «Un yanqui en Italia» (1945).

Un año después, acompañó a Vittorio de Sica en «Roma, ciudad libre» (1946), de Marcello Pagliero y luego en los Estados Unidos «Cagliostro, el malvado» (1949), de Gregory Ratoff, con Orson Welles, entre otras.

En Inglaterra fue figura central de «Conspiración siniestra» (1951), y en Estados Unidos de «Conspiración trágica» (1951) de Robert Wise, de vuelta en Italia participó en «Lulú» (1953), y «Mujeres prohibidas» (1953).

En Estados Unidos fue parte del elenco de «La condesa descalza» (1954), detrás de Humphrey Bogart, Ava Gardner, y en España participó en «Calabuch» (1956), de Luis García Berlanga, junto a Edmond Gwenn.

En la segunda mitad de esa década comenzó su incursión en la ascendente televisión, en la multitudinaria «Barrarabás» (1961), de Richard Fleisher y en «Julieta de los espíritus» (1965), de Federico Fellini.

También actuó a las órdenes de Franco Zeffirelli en «Hermano sol, hermana luna», en «El asesinato de Trotsky» (1972), de Joseph Losey, encarnando a Natalia Sedowa y «La noche americana» (1973), de Francois Truffaut

Desde entonces volvió con apariciones breves o papeles secundarios en cine y televisión, siendo la última «Sueño de libertad» (1993), de Zeffirelli, acerca de un relato de Giovanni Verga, donde encarnó a una religiosa.

La cámara funeraria se instalará en el Piccolo Teatro Grassi di Milano-Teatro Di Europa, mientras que el funeral tendrá lugar el viernes, a las 11, en la iglesia de San Marco, donde se tocó por primera vez el Requiem de Verdi.