Así lo estableció un dictamen del Tribunal Supremo de dicho país. La lucha para conseguirlo llevó diez años de batalla judicial
Tras más de diez años de una batalla judicial, las parejas del mismo sexo de Israel podrán acceder a la gestación subrogada luego de que un dictamen favorable del Tribunal Supremo de ese país así lo autorizara.
En un plazo de seis meses, las restricciones que hasta ahora tenían las parejas del mismo sexo para recurrir a la maternidad subrogada serán levantadas ya que el que el máximo tribunal de justicia de Israel resolvió fallar a favor de la pareja homosexual formada por Etai y Yoav Arad-Pinkas.
En 2010, la pareja reclamó ante la justicia su derecho a la subrogación de un vientre, una posibilidad vedada a personas del mismo sexo pero que sí estaba autorizada para heterosexuales desde el año 1996, tanto para matrimonios como mujeres solteras.
Etai y Yoav Arad-Pinkas fueron los primeros en llevar su caso a los tribunales y en 2015, luego de haber sufrido un revés judicial, lanzaron una petición junto a grupos de derechos LGTBQ.
«No podemos aceptar los continuos daños y violaciones de los derechos humanos del actual régimen», escribió la presidenta del tribunal, Esther Hayut, en su decisión, informó la agencia de noticias AFP.
Israel es el país de Oriente Medio donde los homosexuales tienen más derechos y cuenta con varios hombres abiertamente homosexuales en el Parlamento.
Sin embargo, hasta ahora la maternidad subrogada estaba prohibida para las parejas del mismo sexo, por lo que debían recurrir a países como India, Nepal, Tailandia y Estados Unidos, donde sí está permitida.
El año pasado, el Tribunal Supremo ordenó a los legisladores que pusieran fin a la discriminación relativa a la maternidad subrogada en un plazo de 12 meses, afirmando que la exclusión de las parejas del mismo sexo y de los hombres solteros era inconstitucional.
Oz Parvin, responsable de la Asociación de Padres Homosexuales de Israel, calificó la decisión del domingo de «increíble».
Por su parte, el diputado de extrema derecha Bezalel Smotrich, del partido opositor Sionismo Religioso, dijo que el dictamen es una señal del «colapso de la judeidad del Estado de Israel».