El año pasado un equipo de científicos analizó 135 variedades de frutas y verduras, de las más consumidas en la capital argentina y en la ciudad de La Plata. La conclusión de dicho análisis fue que el 65 por ciento están contaminadas con al menos plaguicidas y casi el 40 por ciento de ese número tiene niveles tan elevados que se desaconseja su consumo.
El estudio se hizo en el Centro de Investigación del Medio Ambiente (CIMA), de la Universidad de La Plata (UNLA), el Espacio Multidisciplinario de la Interacción y el Conicet y los resultados fueron publicados en la revista Food Control, el órgano de difusión de la Federación Europea de Ciencia y Tecnología de Alimentos.
La fruta que mas cantidad de plaguicida contenía, según esta investigación, fue la naranja. Entre las verduras y hortalizas la zanahoria ocupó el primer puesto y luego le seguían los tomates, pimientos y la lechuga.
Para detallarlo en números 7 de cada 10 naranjas, zanahorias y tomates contenían residuos de plaguicida, el resto presentaba
valores superiores a los Límites Máximos de Residuos (LMR),
Con respecto a los pimientos y lechugas, dieron positivo en algún compuesto, solo el 30 por ciento del primero y el 40 por ciento de los segundos mostraron concentraciones de residuos superiores al umbral del LMR.
Los compuestos que se detectaron en dicho sondeo fueron
insecticida clorpirifos, fungicida, epoxiconazol; endolsulfan y cipermectina,
Los científicos que llevaron adelante la investigación recomendaron implementar programas que permitan el conocimiento, la capacitación y el monitoreo de los vegetales en cuestión.
Es conveniente aclarar, que más allá de la validez del informe publicado, en la Argentina, desde hace varios años, se vienen realizando cursos de capacitación para el manejo de los fitosanitarios para imponer las Buenas Prácticas Agrícolas (BPA), junto a cámaras empresarias, organismos técnicos y representantes de entes nacionales. Todos estos datos fueron publicados en el portal Noticias Agropecuarias