Más noticias

Día Mundial

Infografía: el 40% de las personas que padecen hipertensión no lo saben


Este 17 de mayo es el Día Mundial de la Hipertensión Arterial. La celebración de esta fecha tiene como objetivo la toma de conciencia sobre lo importante de mantener un estilo de vida y una presión arterial saludable.

La hipertensión arterial es una enfermedad de tipo crónico, caracterizada por un incremento de la presión sanguínea en las arterias. Una de las maneras de mantener la presión controlada es a través de una alimentación reducida en sodio. Es una enfermedad frecuente que afecta a más de un tercio de la población adulta.

Se produce por el aumento de la fuerza que ejerce la sangre sobre las arterias de forma sostenida. No da síntomas durante mucho tiempo y, si no se trata, puede desencadenar complicaciones severas como infarto de corazón, accidente cerebrovascular, daño renal y ocular, entre otras complicaciones.

Es importante graduar la ingesta del sodio ya que su consumo en altos niveles podría provocar hipertensión arterial y/o acumulación de líquido en personas con insuficiencia cardíaca congestiva, cirrosis del hígado o nefropatía.

Para evitar esto, los adultos deben limitar el consumo de sodio a 2,300 mg por día y, quienes padezcan de hipertensión, 1,500 mg por día. Las personas que padecen insuficiencia cardíaca congestiva, cirrosis hepática y nefropatía pueden necesitar cantidades mucho más bajas. Lo ideal sería no superar los 3 blisters de sal al día (es decir, 3 grs totales al día agregados a las comidas, como máximo).

A pesar de que no existen cantidades de sodio específicas recomendadas para bebés, niños y adolescentes, es importante acostumbrar al organismo a consumir moderadas cantidades de sal y, de ser posible, no agregar sal a las comidas ya elaboradas, lo que hace que luego esa comida vaya perdiendo el sabor y cada vez hagan falta cantidades más elevadas de sal. Una alternativa para esto es reemplazar esta falta de sabor con condimentos aromáticos (orégano, perejil, tomillo, albahaca, pimienta, etc.) y jugo de limón.

Para graduar la ingesta de sodio, los especialistas recomiendan una dieta que contenga distintos tipos de alimentos, entre los cuales se encuentran:

  • Verduras: Zanahoria, brócoli, lechuga, acelga, tomate, cebolla y papa.
  • Frutas: Mandarina, naranja, arándano, fresa, manzana, uva.
  • Cereales y granos: Avena, maíz, lentejas, nueces, café, pasta y arroz.

Mirá la infografía: