Los alimentos aumentaron 7,7% y se ubicaron por debajo de la inflación promedio. Sin embargo, fue el rubro que tuvo mayor incidencia sobre el índice general
Pese a que los alimentos subieron un 7,7 por ciento en noviembre, por debajo del índice general, que alcanzó el 8,3%, el rubro tuvo una fuerte incidencia en el guarismo, con subas en Carnes y derivados, Pan y cereales y Leche, productos lácteos y huevos.
La inflación se moderó en octubre y volvió a ser de un dígito, dato clave que trajo alivio al Gobierno, días antes del balotaje que enfrentará al actual ministro de Economía, Sergio Massa, con el libertario Javier Milei.
El Índice de Precios al Consumidor (IPC) del mes pasado se ubicó en 8,3% y una de las variables que suele estar por encima del promedio son los alimentos, que esta vez quedó por debajo.
Los alimentos aumentaron 7,7% y se ubicaron por debajo de la inflación promedio. Sin embargo, fue el rubro que tuvo mayor incidencia sobre el índice general.
De esta manera el rubro lleva un incremento en los primeros diez meses del año de 134,2%, ubicándose 14,2 puntos porcentuales por encima del índice general.
En cuanto a valores de referencia el alimento que más aumentó en el GBA fue del rubro de «frutas y verduras». La lechuga, cuyo valor por kilo pasó de $571,60 a $804,03, lo que representa un salto de 40,7%. Otros productos que sufrieron aumentos importantes dentro de esta división fueron el tomate redondo (24,5%) y el limón (23,8%). Generalmente este rubro, atado a precios de estación, suele reconocer los mayores aumentos.
Al observar en detalle los precios que informa INDEC en el GBA se pueden advertir, excluyendo variaciones estacionales, rubros que son consistentes en el aumento con todos los productos testigo, como el caso de la carne. El kilo de asado aumentó un 8,8% de $2.846,01 en septiembre a $3.097,23 en octubre. El cuadril por kilo, registró un incremento del 6,4%, la paleta 5,8%, la nalga 5,6% y la carne picada 4,7%.
Por su parte, el valor del pollo entero pasó de $993,40 a $1.100,39 (10,8%) y el pack de hamburguesas congeladas se incrementó un 8,5% de $1.247,82 a $1.353,47.
Otros productos sensibles en la alimentación de los argentinos que tuvieron un importante aumento fueron el arroz blanco simple, que pasó de $582,04 a $789,18 por kilo (35,6%) y los fideos secos, que costaba $391,36 en septiembre y su valor en góndola llegó a $516,94 en octubre (32,1%).
Le siguieron la sal fina en paquete por 500 gramos, con un aumento del 16,4%, el kilo de azúcar (15,7%), harina común 000 (11,7%), yogur firme (11,4%), leche en sachet, que pasó de $381,93 a $413,30 (8,2%), queso cremoso (7,4%), leche en polvo (7,3%) y los huevos de gallina por docena pasando de $1.247,41 a $1.313,33 (5,3%).