El fuego destruyó por completo tres habitaciones en una residencia del barrio Martín. Piden ropa, alimentos, herramientas y apoyo económico para volver a empezar.
Lo que debía ser una noche tranquila tras un partido de fútbol entre amigos terminó en una tragedia material que dejó a seis jóvenes sin nada. Joaquín, Felipe y Santino, junto a otros tres residentes de la residencia Donatella, ubicada en Buenos Aires 1222, en pleno barrio Martín, vieron sus habitaciones consumidas por el fuego este lunes por la noche. El incendio, que comenzó cerca de las 20.20, destruyó por completo tres habitaciones, dejando como saldo la pérdida total de ropa, calzado, herramientas de trabajo, alimentos y productos de higiene personal.
Según relataron los propios habitantes, un caloventor habría iniciado el fuego, que rápidamente se propagó. Tres dotaciones de Bomberos Zapadores trabajaron en el lugar y lograron controlar el incendio antes de que afectara a toda la estructura, aunque el daño emocional y material ya estaba hecho. Por fortuna, no hubo heridos, pero el impacto para quienes perdieron todo fue devastador.
“Quedé en shock. Nos evacuaron y cinco minutos después llegaron los bomberos”, contó Joaquín Ferraro, de 21 años, quien hacía apenas tres meses vivía en la residencia. Su habitación fue una de las más afectadas. Por su parte, Felipe, de 22 años, perdió todas sus herramientas de barbería, que usaba para trabajar, mientras que una estudiante de Rafaela vio cómo el fuego consumía su máquina de coser, vital para su formación en corte y confección. Santino, de 21 años y oriundo de Pergamino, también perdió todo: “Me quedé sin celular, sin máquinas, ni zapatillas”, contó.
Frente al desastre, la comunidad de la residencia activó rápidamente una campaña solidaria para acompañar a los afectados. Se solicita la donación de ropa de abrigo talles S y M, calzado números 36, 41, 43 y 47, elementos de higiene y limpieza, y alimentos no perecederos. Las donaciones pueden acercarse directamente a la residencia Donatella (Buenos Aires 1222) o enviarse por servicio de cadetería, que será cubierto por los propios residentes.
Además, se habilitó una cuenta bancaria a nombre de Stefano Joaquín Ferraro, uno de los damnificados, para quienes deseen colaborar económicamente:
Alias: JoaquinFerraro
La residencia Donatella, de estructura antigua, pisos de cerámica y un gran patio central, alberga a jóvenes de entre 18 y 25 años, en su mayoría estudiantes provenientes del interior de Santa Fe y otras provincias. Para muchos de ellos, vivir allí es su primera experiencia lejos de casa. “Hay chicos que no tienen el apoyo de sus familias o directamente no tienen a quién acudir. En situaciones como esta, todo es más complicado”, lamentó Santino.