La Confederación Evangélica Bautista Argentina (CEBA), que reúne a más de 1.200 iglesias, afirmó este miércoles que el último proyecto de «interrupución voluntaria del embarazo (IVE) presentado en el Congreso implica «un absoluto desprecio por la vida» y pidió a los diputados que legislen «a favor de los seres humanos en formación».
Los evangélicos consideraron «inaceptable que una adolescente entre los 13 y 16 años pueda decidir libremente» realizarse un aborto, una práctica que «siempre implica un alto riesgo» para la salud física y mental y que no se la debe incluir en el Plan Médico Obligatorio (PM0) de la salud pública.
Hablar de IVE es un «eufemismo errado para referirse a la acción de abortar», que es irreversible, por lo que el «derecho a elegir» de la gestante «se contrapone con el primigenio, básico y esencial derecho a la vida de la persona por nacer reconocida en nuestro ordenamiento jurídico», señalaron en un comunicado.
El reclamo firmado por el pastor Hugo Márquez, presidente de la CEBA, se basa «en la legislación argentina, la Constitución Nacional, el Código Civil y Comercial y los Tratados Internacionales», que «protegen al niño por nacer desde su concepción, y lo hace sujeto de derecho», fundamentaron.
También calificaron de «falaz la pretensión de vincular a la profesión médica con el aborto», que «no debe enmascararse» como «parte del servicio de salud pública, ya que «no es propio de la medicina el matar personas inocentes e indefensas». Aplicar la legislación propuesta a «gestantes en tránsito» convertirá a Argentina «en un lugar de turismo propicio para realizar abortos gratis que todos pagaremos con nuestros impuestos», expusieron.
Para la CEBA, «la pretensión de extender el fallo FAL» de la Corte Suprema sobre el aborto en casos de violación sólo con «la mera declaración jurada de la víctima es ni más ni menos que la oficialización del abuso y el avasallamiento de la vida humana en desarrollo».
Asimismo, siguen, «pretender callar el derecho constitucional de la objeción de conciencia» de los médicos contradice ormas básicas de derechos humanos y el fundamento constitucional argentino, por lo que tampoco resulta admisible que se los condene «por negarse a realizar» aquello para lo que se formaron, que es «salvar vidas».
La CEBA también cuestionó que se imponga la «ideología de género» en las escuelas, ni a los docentes ni a los alumnos, y finalmente pidieron a diputados y senadores que al tratar el proyecto de IVE «tengan en cuenta la voluntad de la mayoría» de los argentinos, que es «a favor de la vida».