El pasado sábado en la cancha del club Almirante Brown, de Entre Ríos, se jugaba un partido de la quinta división de la Liga Federaense de Fútbol, entre el local y el equipo de Vecinal.
El hecho singular ocurrió cuando los asistentes del árbitro Daniel Benítez, advirtieron que uno de los jugadores tenía roto uno de sus botines y los había emparchado con cinta tipo aisladora.
Varios de los presentes habían observado la situación, por eso sorprendió el momento cuando Benítez paró el partido y dirigiéndose a un costado, llamó al jovencito de Vecinal; se sacó sus botines y se los cedió para que pueda seguir disputando el partido.
Luego el árbitro, integrante de la agrupación de árbitros de fútbol de Concordia, se calzó un par de zapatillas, y se reanudó el partido de fútbol, publicó AdnFederación.
Cabe mencionar que el club Vecinal tiene su origen en la zona más vulnerable de la ciudad Jardín y que pueden ser parte de esta competencia gracias al inmenso esfuerzo que hacen sus dirigentes.
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