El encuentro tuvo lugar en la sede que el gremio petroquímico Soepu tiene en San Lorenzo
El Sindicato de Obreros y Empleados Petroquímicos Unidos (Soepu) encabezó este martes una mesa de diálogo con legisladores, representantes gremiales y trabajadores para evaluar la situación actual de la empresa Dow y evitar su cierre.
El encuentro tuvo lugar en la sede que el Soepu tiene en San Lorenzo y contó con un nutrido número de participantes que advirtieron que el cierre de la planta ubicada en Puerto General San Martín puede detonar la matriz productiva santafesina.
“Todos los sectores tenemos que trabajar en pinza para levantar esto. La Provincia y el ministro de Producción (Gustavo Puccini) tienen herramientas para empezar a frenar el cierre. Necesitamos que aparezca tiempo para que el Gobierno provincial y la Nación abran un concurso de oferentes interesados en seguir produciendo, algo que es altamente rentable”, destacó el secretario general del Soepu, Mauricio Brizuela.
El gremialista advirtió que la problemática de Dow debe ser entendida como un conflicto nodal dentro del escenario productivo santafesino y nacional, pudiendo generar unos 3.000 despidos en los próximos meses.
“Va a haber un montón de pymes que no van a poder competir. Dicen que Dow va a importar desde Brasil, pero eso va a hacer que en la cadena de distribución haya más actores, lo que radicaría en un aumento de precios que nos va a dejar afuera del mercado. No tenemos ninguna duda de que será así”, planteó Brizuela, quien además indicó que “la empresa es proveedora de unas ocho ramas productivas que van desde el sector automotriz hasta todo lo que tiene que ver con pintura, goma espuma y construcción”.
En 2021, la empresa ya tuvo un intento de cierre y una intervención del Gobierno nacional y el provincial pudo frenarlo. Los participantes de la mesa de diálogo de este martes sostienen que esa reacción estatal debería repetirse para cuidar miles de puestos laborales, pero a la vez asumen que en la Casa Rosada hay un presidente que no está interesado en actuar.
“No somos optimistas, por eso entablamos esta mesa de diálogo para que aparezcan nuevas propuestas de todos los partidos políticos. En su momento, en el 2021, apoyaron. Necesitamos que apoyen de nuevo y nos den tiempo para que oferentes con ese calibre económico se puedan hacer cargo de una producción que es altamente rentable. Están los informes. Esta es una reorganización de Dow para maximizar su ganancia en Brasil, donde han invertido mucha plata hace años. Quieren recuperar un poco lo que invirtieron en Brasil exportando hacia Argentina y Chile”, resaltó Brizuela.
Apoyos
Los gremialistas que participaron de la mesa de diálogo de este martes no dudaron en anticipar que se plegarán a las medidas de protesta que el Soepu considere adecuadas para frenar el cierre de la planta de Puerto General San Martín.
El secretario general del Sindicato de Empleados de Correos y Telégrafos de Rosario, Walter Palombi, dijo que desde la Intersindical Rosario “están para hacer un frente común que enfrente este el modelo económico que viene a destruir el país”.
Por su parte, el líder del Sindicato de Luz y Fuerza, Alberto Botto, lamentó estar atravesando un contexto que lo retrotrae tanto a la década del 90, “donde las políticas generaron que haya desnutrición en el cordón industrial”.
En esta sintonía, el secretario general de Festram, Jesús «Noni» Monzón, insistió en que el ministro de Desarrollo Productivo, Gustavo Puccini, “atienda al gremio para interiorizarse de la situación y actuar en consecuencia con el objetivo de evitar el cierre de Dow”.
Entre los legisladores que asistieron al encuentro con los trabajadores estuvieron los diputados provinciales Carlos del Frade (Frente Amplio por la Soberanía) y Lucila De Ponti (Santa Fe Sin Miedo), y Eduardo Toniolli, integrante de la bancada de Unión por la Patria en la Cámara baja nacional.
Del Frade destacó que “estamos en uno de los sindicatos con mayores historias de nuestra zona, hace 50 años atrás cuando Petroquímica Argentina Sociedad Anónima era la síntesis de cinco empresas norteamericanas los compañeros del Soepu lograron el control obrero de la producción durante una mes durante el 26 de julio de 1974 y el 22 de agosto de ese mismo año”, recordó el diputado.
Situándose en el presente Del Frade fue crudo al decir que “estamos frente a un grupo de delincuentes de guante blanco que generan dolor porque acá no se trata de una empresa en crisis sino se trata de un grupo multinacional presente en 31 países y que el año pasado dijo que facturó en esos 31 países unos 45 mil millones de dólares”.
“Por eso cerrar la empresa diciendo que no tiene problemas económicos es una decisión deliberada, premeditada y con alevosía de despedir a 120 trabajadores, eso es hacerle el mal a esos 120 trabajadores”, lanzó.