El ex futbolista y la modelo arreglaron que ella se quede con la casa que compartían en el barrio privado de Santa Bárbara, en Nordelta
Tras ocho años a puro conflicto, el ex matrimonio conformado por la modelo Wanda Nara y el futbolista Maximiliano López llegó a un acuerdo legal, por el cual ella se quedará con la propiedad de una casa en Nordelta valuada en dos millones de dólares y a cambio desistirá de seguir adelante con sus demandas por cuotas impagas de alimentos.
Desde que se separaron en 2013, Wanda Nara y Maxi López se vieron envueltos en decenas de conflictos mediáticos y judiciales por estar en desacuerdo en la crianza de sus hijos Valentino, Constantino y Benedicto.
Sin embargo, en medio de la crisis matrimonial de la mediática con Mauro Icardi, quedó expuesto el acercamiento de la ex pareja, desde un lugar mucho más tranquilo y maduro.
Así, luego de ocho años de malestar, decidieron ponerle un punto final a su eterna batalla judicial.
El ex futbolista y la modelo arreglaron que ella se quede con la casa que compartían en el barrio privado de Santa Bárbara, en Nordelta.
La propiedad tiene 1.800 m2 (800 m2 cubiertos y 1.000 de parque) y está valuada en dos millones de dólares.
Tiene once años de antigüedad y cuenta con 7 ambientes, 5 habitaciones y 5 baños distribuidos en 3 plantas, 2 cocheras y pileta.
Con la cesión, López deja saldada la deuda por la cuota alimentaria de sus hijos hasta que cumplan la mayoría de edad.
«No hay deuda de Maxi de ningún tipo. Desistieron de todas las causas que tenían, que eran más de 40, escrituraron la mansión de Santa Bárbara a nombre de Wanda y él deja de pagar alimentos», se explicó en el programa «Los ángeles de la mañana».
Por su parte, López se quedó con otras dos propiedades que había adquirido durante su matrimonio con la modelo.
En los últimos días, más allá de los años que estuvieron enemistados, Maxi fue un gran sostén para Wanda. El deportista está enfocado en recuperar el tiempo perdido con sus varones e intenta estar presente todo el tiempo. De hecho, cuando tras descubrir los chats de Icardi con la China Suárez, Nara viajó a Milán, su ex marido se llevó a los chicos para que se mantuvieran ajenos a los conflictos y también se ofreció a cuidar a Francesca e Isabella, las hijas de la rubia con el jugador del PSG.