Hubo un sentido minuto de silencio, banderas e imágenes en la pantalla para recordar al DT que fue campeón con ambos clubes
El partido entre Vélez y Rosario Central se transformó en un sentido homenaje a Miguel Ángel Russo, el entrenador que marcó una era en ambos clubes y dejó una huella imborrable en el fútbol argentino.
El pasado miércoles, el fútbol despidió a Russo, fallecido a los 69 años, y la noche del Amalfitani fue una verdadera muestra de cariño y respeto. El técnico fue campeón con Vélez en el Clausura 2005 y con Central en la Copa de la Liga Profesional 2023, además de haber conducido al Canalla al ascenso en 2013.
Los jugadores de Central vistieron una camiseta que tuvo un recuerdo especial: lucieron un parche especial en el pecho, con la imagen de “Miguelo” besando el trofeo de la Copa de la Liga, una postal eterna del último título conseguido por el club de Arroyito.
El homenaje comenzó antes del inicio del partido. En la pantalla gigante del José Amalfitani se proyectó un video con imágenes de Russo al frente de Vélez, sus festejos de campeón y declaraciones cargadas de emoción. La voz del estadio repasó su trayectoria y todo el público lo despidió con un aplauso cerrado.
Luego, la Liga Profesional llevó al campo de juego los trofeos que Russo levantó con ambos equipos: el del Clausura 2005 con Vélez y el de la Copa de la Liga 2023 con Central. En el medio, un atril exhibía una gran foto del entrenador con una sola palabra de fondo: “Campeón”.
El minuto de silencio fue un momento de profundo respeto. Los jugadores de los dos clubes se alinearon mirando la pantalla donde se veía el rostro sereno de Miguel y las fechas de su vida. Cuando el homenaje terminó, el estadio entero se puso de pie para aplaudirlo una vez más.