El movimiento islamista palestino atribuyó sus fallecimientos a un ataque israelí, pero las fuerzas de ese país no confirmaron la información
El movimiento islamista palestino Hamas dijo hoy que durante las conversaciones para prolongar la tregua se ofreció a entregar los cuerpos del bebé argentino de 10 meses, su hermano y su madre, que fueron tomados como rehenes, aunque Israel no confirmó esa información ni esas muertes.
Hamas había anunciado anteayer la muerte del bebé Kfir Bibas, de su hermano Ariel, de cuatro años, y de su madre Sherry Silverman, que habían sido secuestrados del kibutz Nir Oz junto al padre de la familia, Yarden, durante el ataque en el sur de Israel del 7 de octubre pasado.
Atribuyó sus fallecimientos a un ataque israelí, pero las fuerzas de ese país no confirmaron la información, afirmaron que están investigando su veracidad y responsabilizaron al grupo palestino por la seguridad de los rehenes que mantiene en la Franja de Gaza.
El vocero de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI), Daniel Hagari, confirmó ayer que la versión de que la mujer y sus dos hijos pequeños fueron asesinados aún no está probada, tras calificar de «terror psicológico» un video que apareció del padre culpando al primer ministro Benjamin Netanyahu por lo sucedido.
Los combates entre Israel y Hamas se reanudaron hoy, después de que las negociaciones para prorrogar la tregua temporal iniciada siete días antes terminaran en fracaso.
«Durante la noche, tuvieron lugar negociaciones indirectas para extender la tregua», indicó el movimiento islamista en un comunicado.
«Hamas también se ofreció a entregar los cuerpos de la familia Bibas y liberar a su padre para su entierro, junto a dos detenidos sionistas», afirmó el grupo y aseguró que las autoridades israelíes «permanecieron indiferentes» ante la propuesta.
Por su parte, la oficina del primer ministro israelí declaró a la agencia de noticias AFP que «Israel no abordará los informes propagandísticos de Hamas».
El portavoz del gobierno, Eylon Levy, culpó hoy al grupo palestino del fracaso en las negociaciones para prorrogar la tregua, acusando a los islamistas de «no haber proporcionado una lista con más rehenes para liberar».
La tregua marcó una pausa en los combates iniciados el 7 de octubre cuando milicianos de Hamas irrumpieron en Israel, en un ataque sorpresa que dejó más de 1.200 muertos, en su mayoría civiles, y 240 secuestrados, entre ellos una veintena con nacionalidad argentina.
En respuesta, Israel prometió eliminar a Hamas y desató una campaña de ataques aéreos y terrestres en Gaza que, según el ministerio de Salud del enclave palestino, dejó más de 15.000 muertos, en su mayoría civiles.