Los servicios de desminado desactivaron este jueves una bomba estadounidense de 450 kg de la Segunda Guerra Mundial descubierta en una obra de un barrio comercial muy concurrido del centro de Hong Kong.
Es la segunda vez en una semana que se hace un descubrimiento de este tipo en esta enorme obra, realizada para la construcción de una nueva línea de metro, justo a la costanera del barrio de Wanchai.
Después de que un obrero descubriera el miércoles una bomba, la policía acordonó parcialmente la zona, se evacuó a 4.000 personas y se suspendieron las rotaciones de los ferris que atraviesan la bahía Victoria.
«Las operaciones de desminado pueden ser sucias, difíciles y peligrosas. En ese caso, los tres calificativos eran ciertos», declaró a la prensa Alick McWhirter, un responsable de los servicios de desminado.
Las labores se vieron dificultadas por la lluvia y la complicación del lugar. Los agentes de desminado trabajaron toda la noche, explicó McWhirther.
Los trabajadores abrieron un gran agujero en la bomba, de 1,70 metros de largo, antes de quemar los materiales explosivos de su interior. Después se extrajo el artefacto con ayuda de una grúa.
No es raro que paseantes y obreros se encuentren bombas o municiones sin explotar en Hong Kong, que fue escenario de violentos combates entre Japón y Estados Unidos y sus aliados desde la invasión japonesa de diciembre de 1941 hasta la liberación de la ciudad, en el verano de 1945.
El mayor artefacto encontrado en este territorio semiautónomo del sur de China fue una bomba, desactivada en 2014 en el barrio de Happy Valley de la isla de Hong Kong.