"No hubo una agresión mía, simplemente me negué a dar el documento y me golpearon y me tiraron al piso", relató Ricardo, el hombre violentamente agredido en el microcentro
Las imágenes se viralizaron por las redes en cuestión de minutos: dos policías reduciendo con una inusitada violencia a un repartidor tras una discusión que se originó por una multa de tránsito. Ricardo, el hombre de 37 años agredido durante la tarde del martes, habló sobre lo ocurrido: contó que tiene «heridas en todo el cuerpo» y aseguró que «es falso» que se resisitó.
El conductor del utilitario relató la violencia con la que fue reducido en Mitre al 900: «Un policía me estaba estrangulando, no me pasaba una gota de aire, en un momento perdí la conciencia porque no podía respirar y no me podía defender. Yo intentaba no asfixiarme, eso no es resistencia».
En declaraciones a Radio 2, el repartidor reconoció que había estacionado su vehículo en un lugar prohibido y que discutió con una inspectora de tránsito que le hizo una multa. El propio Ricardo grabó esa conversación en donde la mujer lo acusa de intentar pisar a su compañero y él lo niega. Ella le pide los papeles del auto y le exige que se identifique. El intercambio no pasa a mayores (hasta allí no hubo insultos ni agresiones físicas) pero la agente llamó a la Policía.
Con el arribo de los uniformados la situación se agravó: «La Policía me exige documentos, ¿por qué le tengo que dar el documento sino no cometí ningún delito? Estaba afuera del auto y ante esa negativa más que reducido fui golpeado. No hubo una agresión mía, simplemente me negué a dar el documento y me golpearon y me tiraron al piso. Es falso que me resistí», relató.
Además, el repartidor también desmintió que haya intentado quitarle el arma a uno de los policías: «Es ridículo intentar robarle un arma a la Policía, sabiendo que le estoy dando un motivo para que me acribille. Tampoco lo insulté», aclaró sobre ese momento de desesperación en el que lo estrangulan y se queda sin aire.
«Tengo heridas en el cuerpo, el ojo negro, la cabeza roja, con contusiones por todos lados, el cuello que no puedo respirar, esta no es mi voz normal, el estrangulamiento me afectó y no pude dormir bien porque no podía tragar», describió.
Por otro lado, afirmó que estuvo arrestado hasta la medianoche sin que nadie le explique los motivos: «Un policía me dijo mientras me golpeaba y me insultaba: «Me quisiste sacar el arma», pero no tuve ninguna explicación oficial».
«Estuve un tiempo largo detenido y recién después me atendieron los médicos», dijo y agregó: «Tengo 37 años, ningún antecedente y nunca estuve detenido. Trabajo desde los 14 años. Lo único que hago es trabajar».